Recuperado ya de la embriaguez que produce ver un montón de películas dispares seguidas en muy poco tiempo puedo escribir una crónica de lo que fue la 9ª muestra.
Jueves: por culpa de las medidas de seguridad para ver la de John Carter (me han dicho que es muy floja y demasiado larga) los que queríamos ver El gabinate del doctor Caligari tuvimos que esperar una hora en la calle con un frío pelón y sufrir un retraso de media hora en el horario previsto. Nunca había visto esta legendaria película. Había leído sobre ella, es inevitable, y visto un montón de fotos pero nunca me había puesto a verla. Ahora puedo decir que El gabinete es un clásico porque casi 100 años después sigue siendo una película vanguardista. No importa que su lenguaje cinematográfico sea rudimentario y limitado (principalmente por la primitiva tecnología), tanto la estética expresionista como una composición en profundidad y un guión que sabe mantener el misterio hasta el final hacen que sea una película que se mantiene lozana. La música de Pegasvs en directo genial. Una música moderna y electrónica, por tanto, muy diferente a la que concibieron los autores de El gabinete, pero que para nuestra mentalidad moderna encaja mucho mejor con ella que la música clásica contemporánea original. Una BS perfecta muy ajustada que complementan perfectamente a las imágenes de una las películas más influyentes del Cine y una de las películas mudas más modernas.
Viernes: este día se presentaba como el más mediocre de todos. Las películas programadas no parecían nade del otro mundo y daban la impresión de ser muy similares en calidad. Hell partía de una buena base pero la falta de presupuesto (lo que sugiere que Emmerich es más bien avaro) y su ritmo lento típicamente alemán la aguan conviertiéndola en una película vulgar. Stakeland es una película bastante mala por su falta de presupuesto, su guión vulgar, desmadejado y tópico y su dirección ramplona. Una chorrada. Hobo with shotgun es una parodia tanto estética como ideológica del cine justiciero de los 80 que esta hecha por unos cabezas huecas de modo que la película es un disparate anárquico que aburre y hace naufragar al pobre R. Hauer. No era mala idea pero hay que aportar un poco más. Con todo es, de las tres, la que tiene los mejores momentos.
Sábado: el día fuerte. Empezó con The Prodigies 3D una película de animación por ordenador francesa con poco presupuesto que parte de las ideas de los mutantes marvelianos para construir una película de chavales con poderes interesante y novedosa. Siendo una mediocridad es mucho mejor que todas las del día anterior juntas. The woman al final resultó ser la mejor de la muestra y una de las mejores de las diferentes ediciones. Una película diferente muy bien desarrollada e interpretada, con un sólido guión y una competente dirección de L. McKee , con algo que decir y valiente. Una lástima que no se vaya a estrenar en España porque es mucho mejor que el producto medio de Terror que sí se estrena en nuestro país. Genuino cine Fantástico de Terror. Apollo 18 es una estupidez total así que explica perfectamente por sí misma porque esta película no nos va a llegar. ¿Por qué intentar hacer pasar una película protagonizada por actores actuales por material real de hace casi 40 años? ¿Por qué ofrecer un historia tan tópica y bobalicona? Esta película llega con 30 años de retraso y se nota mucho. 4:44 Last day in Earth era la tradicional apuesta gafapasta de la muestra y por desgracia resultó ser la típica gafapastada. Su ombliguismo y costumbrismo la hacen aburrida. La peli es demasiado autobiográfica y pequeñita como para que interese.
Domingo: el último día. La sesión doble de clásicos magistral. Qué voy a decir yo de Ultimátum a la Tierra y El planeta de los simios? Son películas buenas, especialmente la segunda, porque son competentes, tienen mensaje y nunca se atrancan. Hay que reconocer que antes las películas estaban muy bien estructuradas de modo que eran fáciles de seguir y nunca perdían interés. Eso se hecha mucho de menos. The inkeepers supuso una decepción. Una película muy sólida con buenos actores que falla porque su apuesta por innovar siendo clásico fracasa. Esperemos que un tipo intelgiente y con talento como es T. West aprenda que hay que ser más audaz e inquieto.
Por tanto una muestra como las demás. Demasiado seguidora de Sitges y poco variada. Poco aire fresco porque una afición friki o radical, como la de los superhéroes, ahoga cualquier posibilidad de evolución o revolución, lo que explica porque el Cine Fantástico cada vez es menos imaginativo y novedoso. Que alguien pretenda romper taquillas adaptando flojas novelas que tienen casi un siglo es la prueba que corrobora lo que digo.