Diagnóstico: más feliz que una perdiz :)
Lo cual explica por qué me he tomado tres días para traerte la crónica… (!!!) Es que, realmente, ya de regreso en Madrid he continuado recibiendo sorpresas súper agradables procedentes de Valencia y relacionadas con la presentación. Pero vamos por partes.
El sábado llegué a la capital fallera justo a tiempo para comer con Jud Baltimore de El diván de Jud. Sólo nos conocíamos “virtualmente”, pero eso no le impidió volcarse en mí y brindarme su apoyo desde el momento que supo que haría una presentación en BiblioCafé. Hizo de todo: animarme, promocionarme, repartir invitaciones y ponerse a mi disposición desde que puse un pie en Valencia. Me acompañó todo el tiempo, me hizo una entrevista en vídeo (próximamente publicaré la noticia), grabó mi presentación (enlace al final)… ¡hasta me trajo bollería argentina! Habría empezado esta entrada hablando de Jud aunque no hubiera sido por cuestiones de cronología. Es de esa clase de personas que se merecen un párrafo aparte y sólo por haber podido disfrutar de su compañía, de su cariño sincero y desinteresado, de su sencillez… sólo por eso, estar en Valencia ya mereció la pena.
A los cafés, llegó Olivia Ardey. Estaba guapísima, lo verás en las fotos y el vídeo. Con ella todo es como muy, muy familiar porque nos conocemos desde hace tiempo y volver a verla siempre es motivo de alegría para mí. Fue apenas hora y media, pero dio para charlar, reír, hacernos fotos y comentar fuera de cámara algunas de las preguntas que Jud había preparado para la entrevista.
Cuando llegamos a BiblioCafé, ya había mucha gente esperando, ubicados en sus mesas. Fue una sensación súper agradable no tener que preguntarme “¿vendrá alguien?”. Destacaré también que esta librería cafetería me pareció un sitio ideal: será mi lado argentino que encuentra irresistible la idea de sentarse a una mesa con un buen libro y un buen café. Le dije a José Luis (su dueño) que lo felicitaba por el entorno tan acogedor que había conseguido crear y que lo recomendaría y eso hago: si viajas a Valencia y eres aficionada a la lectura, no dejes de darte una vuelta por BiblioCafé. c/Amadeo de Saboya 17, en la zona del Mestalla.
Lo pasé realmente bien hablando y respondiendo preguntas sobre Princesa. La presencia allí de personas que ya habían leído la novela lo hizo más dinámico y también me permitió recoger feedback, algo que siempre es de agradecer. Como Jud ha grabado toda la presentación en vídeo, no me extenderé, pero sí quiero hacer hincapié en una cuestión. Le pedí a Olivia Ardey que hiciera los honores como maestra de ceremonia en mi presentación valenciana (algo que ella aceptó gustosa) por dos razones que no tienen nada que ver con Princesa: 1) porque a nivel personal siento un grandísimo afecto por ella, y 2) porque es una de mis escritoras románticas favoritas. No podría pensar en alguien más adecuado para sentarse junto a mí en la “mesa de las torturas” y hablar de mí a mis (futuros) lectores. Lo habría sido igualmente aunque Princesa no le hubiera encantado, aunque sólo le hubiera “gustado”. Me enteré poco antes de la presentación que la novela le había dejado muy buen sabor de boca, pero no supe lo que diría sobre ella hasta que lo oí en BiblioCafé… E impactante y súper halagador como resultó, fue apenas un aperitivo comparado con el extenso y detallado correo suyo que recibí dos días más tarde. ¿Qué he hecho con él, aparte de responderlo cuando recuperé el habla? Pincharlo en mi corcho, justo delante de mis ojos. Para que cada día, cuando me siente a crear historias, esté ahí animándome y recordándome por qué escribo.
He preparado un vídeo a modo de album de fotos que encontrarás en la pestaña “En imágenes”. La mayoría de las fotos las tomó Ana María Carrión (¡gracias, Ani!) que se hizo cargo de mi cámara mientras yo me hacía cargo del micrófono :) También hay fotos de Olga Salar y Jud Baltimore.
Y ahora, sin más dilación, te dejo con el vídeo que grabó, editó y montó mi querida Jud Baltimore (¡gracias, Jud!). Si me has acompañado el sábado, quizás te apetezca “rememorarlo” y si por cuestiones de tiempo/distancia no has podido acercarte hasta BiblioCafé, ésto es lo que sucedió allí. Espero que te guste.