El Festival Gigante nos presentó una primera jornada de alto nivel y en especial Cooper volvió a enamorar con un directo muy interesante.
Esta crónica solo hablará de la primera parte de la jornada, por razones de tiempo, solo pudimos ver algunas de las primeras bandas de esta edición, pero podemos atestiguar que el nivel ha sido más que alto.
Lo lógico sería hablar de escenarios, en el Escenario Gigante pudimos disfrutar de las dos primeras bandas y la verdad es que dieron dos grandes directos. Nixon abrieron el festival, una tarea compleja, llena de ese extra que las bandas que lo hacen posible se merecen un aplauso, pero es que no es para menos la banda de Almería salía a por todas con sus 60 minutos de show con un directo basado en su actual disco y la versión de Toro de El Columpio Asesino, pero ante todo demostrando que se lo pasan realmente bien ante un público entregado y no es para menos dado que tienen canciones tan interesantes como Gravitacional y El pasajero traspasaron el escenario y eso se notaba, no solo en la fuerza de la banda, el respetable venció al temible sol para estar junto a ellos. Un concierto de más a mucho más, algo que es de agradecer. El siguiente en ese escenario era Cooper, un show en una despedida que pese a entristecer, para nosotros fue de lo mejor de lo que vimos; se notaba la calidad Cierra los ojo, Ya llegó el verano... canciones que han hecho historia y con una formación de quinteto, hizo que todos sus fans cantasen y se emocionasen y Alex junto a la banda respondió dando ese concierto perfecto en el tempo, entonación y en la puesta en escena; es por esto que pese a que es una gira en la que se escucha la despedida, su sonido marcó el festival en muchos aspectos.
El escenario Guadalajara nos permitió ver a Colectivo Panamera y gustaron a los presentes, no solo por la colaboración de Rozalén con un tema nuevo (previsto para dentro de poco). Les dió tiempo a recuperar todo el disco en este show, recuperar sus canciones más latinas y las canciones más cercanas al sor. Hacia el sur apareció en el momento en el que el directo pasó a acercarse a la noche. El cuarteto tiene un sonido muy particular y demostraron que, con ese sonido pueden colarse en los mejores festivales y dieron un paso a delante con esta visión al respecto de la formación y se notó en El arenal, canción que siempre explota sonoramente en directo y así pasó a ser en este directo.
En el caso del Escenario Cocacola, tres bandas fueron las que pudimos ver, The Veroñas, Claim y Tree House; el primer y último de estos artistas presentaron un directo muy interesante, pero nosotros nos quedamos con Claim que siguen de gira con Sofá Paraíso, un disco directo al subconsciente y entraron a matar tras un gran show de The Veroñas que jugaron en casa y se ganaron a muchos asistentes que no les conocían aportando canciones casi de corte punk por la intensidad pero a la vez muy fáciles de seguir; volviendo a la banda murciana, se hicieron grandes desde el escenario, un directo que está dentro de la propuesta de la gira y donde se nota la propuesta del eléctrico con un show compensado por parte de los cinco miembros y que pasa a ser un anticipo de la gira en sala que llega a continuación. Su sonido es pop pero bailable e intenso en partes iguales y parece que los asistentes tuvieron predilección por Río y Sofá Paraíso como los singles más destacados.
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