Carlos Goñi dejó claro que Revolver es y será una de las grandes bandas que dejará el nivel de la escena musical española muy alto. Gracias a ellos todavía podremos seguir escuchando ese rock que no es amor pero que no deja de serlo, una esperanza latente y una humildad inmensa. Apoyando el movimiento revolucionario que se está produciendo en la sociedad española, no dejó de apelar a la lucha y a la justicia que necesita “este país lleno de políticos corruptos”.
Con el cartel de “entradas agotadas” la Sala Apolo se preparaba para un concierto en el que Goñi y la banda estuvieron arropados durante las dos horas que duró el concierto. Abrieron con “No hay mañanas”, primera canción del último disco donde no pueden negar que la grabación en Marrakech ha dejado huella. Con un sonido limpio y contundente prosiguieron “Reconozco la frontera” o “Calle Mayor”, que fue modificada para la ocasión por “Puerta del Sol”. “Odio” y “Manos arriba” prosiguieron en un concierto donde a los asistentes no se les escapó una de las canciones de la discografía de Revolver.

Crónica: Eneko Olalde | Fotografía: Maitane Reguero
