CRUCERO COSTA FASCINOSA
Hoy me apetece escribiros un poco de la empresa a la que le hemos contratado mi marido y yo nuestro viaje de novios, que es la compañía de cruceros costa, empresa que seguro que todo el mundo conoce aunque sólo sea de oídas por ser la de los anuncios de shakira y la que tuvo el accidente del barco que se quedó volcado.
Tengo que decir que sólo he ido de crucero la vez que os comento ahora, por lo que no es mucho lo que puedo decir en comparación con otras empresas del sector, ni tampoco comparando con otros barcos de la misma naviera, pero creo que por lo menos para decir lo que yo pienso sí que tengo criterio suficiente.
Lo primero que tengo que decir es que la experiencia del crucero de entrada sí que me ha gustado bastante, no es que sea mi ideal de viaje, pero para ser mi viaje de novios me ha parecido una experiencia perfecta, porque al final es una forma de hacer un viaje de resort descansando y a la vez pudiendo ver alguna cosa, aunque tengo que decir que si quieres ver de verdad una ciudad el crucero no es una buena opción porque lo ves todo deprisa y corriendo no disfrutas las visitas, por lo que sí que me parece que está bien la experiencia, pero al final lo de salir a visitar las ciudades es más que nada una forma de cambiar el aire y no saturarte demasiado del barco.
Tengo que decir que el barco en el que estuvimos nosotros ha sido el costa fascinosa, muy chulo, no sé si comparando con otros será tan impresionante, pero si es la primera vez que coges un crucero el barco impresiona mucho porque es realmente enorme, con mucho lujo y un trabajo enorme en cada una de las estancias del barco para tener unos ambientes de verdad bien separados.
Hay un teatro no demasiado grande, pero yo creo que a ojo sí que era tan grande como el de la casa de cultura de mi pueblo, así que para ser un barco me parece algo impresionante. Había un espectáculo distinto cada día y dos pases, y la verdad es que de las siete noches que estuvimos tengo que decir que cinco de los espectáculos me parecieron realmente muy buenos y me gustaron mucho, incluso más de lo que esperaba en un principio, así que bien.
En cuanto a los servicios que ofrecían, creo que había bastante cosa, habían muchos bares que eran los que usaban para las actividades especiales, y alguno también temático, me gustó especialmente el piano bar, porque el cantante era realmente muy bueno.
El número de empleados era altísimo, había unos dos mil pasajeros, que en mi opinión han sido demasiados, de hecho ha habido algún momento en el que saliendo de un espectáculo hemos tardado casi quince minutos en poder coger un ascensor de tanta gente que había. Pero bueno, unos dos mil pasajeros y para atenderlos unos mil empleados, de los que la inmensa mayoría no eran europeos, sino que eran de países de Sudamérica y asiáticos, con unas condiciones de trabajo brutales, ya no de sueldo que no lo sé ni lo pregunté, pero sí me enteré de que muchos se pasaban nueve meses al año sin poder bajar del barco, lo que me parece una barbaridad. También me resultó realmente sorprendente y repulsivo ver cómo había mucha gente que trataba al servicio como si fuesen animales, y como algunos de los trabajadores se quedaban realmente sorprendidos cuando veían algo tan sencillo como que mi marido o yo para ahorrar un viaje al camarero después de tomar un café llevábamos las tazas a la barra. En este sentido me parece algo fatal, y es algo que tuve toda la semana pinchándome en la nuca, y lo del último día la verdad es que para mí fue de traca en este sentido. Se supone que iban a dar a las cuatro de la tarde una charla para explicar cómo había que hacer el desembarque, y cuando llegamos a las cuatro menos cinco ya habían terminado de explicarlo, eso sí, luego nos tuvieron veinticinco minutos con el personal desfilando y contándonos que si no nos registrábamos por internet para hacer una valoración con un mínimo de nueve sobre diez los chicos no cobraban todo el sueldo y no podían optar a ascensos. Por cierto, algo que puedo contar es el número de empleados no europeos que tenían a algún otro trabajador a su cargo, y la respuesta es cero, y aún nos decían que trabajan unas once horas diarias (cosa que era mentira porque estaban de siete de la mañana a una de la madrugada) y que por favor nos metiésemos por internet para votar favorablemente a la compañía y ayudar a los pobres chicos. Personalmente creo que para ayudarlos no tengo que mejorar las encuestas de los jefes, lo que tendría que hacer es denunciarlos.
Me da mucha vergüenza ver a una señora como shakira, que se supone que vendía su origen humilde y su compromiso con los más desfavorecidos, como por ejemplo ganando dinero con el waka waka, y aún así le presta su imagen a esta compañía, que se quede con su música quien la quiera, yo personalmente le tengo bastante asco a esta señora.
Otra cosa que no me gustó demasiado es que era un sacadineros por todas partes, se me hace raro ver a algunos de los trabajadores pasándolo verdaderamente mal para que los clientes se dejasen hacer fotos que luego te vendían a unos quince euros, y me da a mí en la nariz que si los trabajadores se ponían tan nerviosos con las fotos es porque les exigían un mínimo para poder cobrar.
También es de traca que pagando un paquete de bebidas tengas incluidos los cubatas, pero si luego quieres una botella de agua te la cobran a parte a tres euretes.
La comida bastante bien, había un buffet para las comidas, desayunos y meriendas, que estaba bastante bien, para ser un buffet es de los que más me han gustado en cuanto a la calidad de la comida que he probado, pero las pegas vienen por un lado porque se juntaba tanta gente que a veces no te podías sentar a comer hasta después de un buen rato buscando una mesa, y que el menú era demasiado italiano para mi gusto, yo la verdad es que me esperaba una compañía un poco más internacional por recibir turistas de todo el mundo, pero el carácter de los espectáculos, la decoración y los menús eran demasiado italianos para mi gusto, que no soy muy amiga de su cocina.
Por las cenas, que eran en un restaurante de más lujo, un detalle que no me gustó es que siendo la luna de miel y lo sabían porque tuvieron un detalle por haber reservado así, no tuvieron el detalle de dejarnos en una mesa a mi marido y a mí solos y nos tocó compartir mesa con un matrimonio catalán que el primer día eran españolistas y el último que ya nos tenían confianza nos dijeron que al bajar del barco se iban a una manifestación independentista, por suerte eran gente muy agradable con la que tuvimos una semana de cenas bastante a gusto.
Así que resumiendo, puedo decir que lo del crucero me ha parecido toda una experiencia, con algunas luces y con algunas sombras, yo personalmente no creo que repita porque algunas cosas me han pesado demasiado, pero creo que si se cambiasen ciertas condiciones sería un viaje realmente bonito si quieres ir de relax, eso sí, para ver cosas de verdad este tipo de viaje no vale un carajo, esto es para comer, descansar y que te saquen los dineros.