Cuadros con retales y corcho

Os voy a confesar que para poder publicar la entrada de hoy he hecho trampas.
Los cuadros que os mostraré los tenía hechos de hacía mucho tiempo, pero para poder mostraros el DIY o paso a paso he desmontado uno y lo he rehecho, ya de paso he aprovechado para lavar la tela, que con el paso del tiempo ya amarilleaba.

Materiales necesarios:
-Tijeras
-Telas
-Grapadora de tapizar (si no la tienes se puede sustituir por pequeños clavos o chinchetas, pero es más laborioso)
-Cuadro de corcho.
-Una hembrilla para colgarlo.
-El gato no es necesario, pero Nati no puede evitar acudir a posar cuando ve que apuntas algún objeto con la cámara


 Una vez reunidos los materiales procedemos a cortar la tela, con un sobrante suficiente para hacer dobladillo a la hora de grapar, así al tensar evitaremos que se deshile la tela.

 A la hora de grapar empezaremos poniendo una grapa en el centro de uno de los lados. La siguiente irá en el opuesto tensando ligeramente.
Es importante hacer esto con los 4 lados: una sola grapa en el centro.
Una vez la tela sujeta por las 4 grapas comprobamos que esté centrada, y ya vamos grapando el resto, siempre tensando. En este caso he puesto una grapa cada 3 dedos.

 Terminado queda una cosa así. El último paso sería poner la hembrilla para poder colgarlo.
 Para esta habitación hice 3 cuadros, dos con un mismo estampado y el tercero que es el que os he mostrado. En su día recuerdo que compré las telas en los saldos de Leroy Merlin y su precio no superó los 10 euros. Los corchos es fácil encontrarlos en cualquier lugar, son económicos y al no pesar se trabaja muy bien con ellos.