¿Cuál será el próximo récord?

Este equipo de récord hoy ha igualado uno nuevo, que es el de quince victorias seguidas en Liga el cual tenía una antigüedad de 50 años. La semana que viene frente al Atlético de Madrid tendrán la oportunidad de batirlo y unirlo a otros como el del máximo número de partidos invictos sumando todas las competiciones, como el de ganar todos los partidos fuera de casa disputados en esta Liga, como el de los 99 puntos de la anterior, y como muchos otros de los cuales ya he perdido la cuenta.
Si el Barça sigue este ritmo que lleva imparable en la Liga el próximo que puede caer es el batido el año anterior de máxima puntuación en la competición doméstica, pero todo dependerá de si el Madrid mantiene la presión en la tabla clasificatoria hasta la última jornada de Liga como ya hiciera el año anterior. Yo prefiero que ese récord no caiga porque dicha presión madridista desaparezca pronto, lo cual será señal de que la Liga será blaugrana.
Y en esta Liga el único equipo que había sido capaz de quitarle los tres puntos a este Barça de récord había sido el Hércules, en una tarde de Septiembre donde gran parte del equipo se encontraba en pre-pre-temporada y venían de un vergonzoso viaje transoceánico a Argentina.
Pero hoy la historia ha sido muy diferente, y aunque el conjunto alicantino le ha puesto mucho empeño en el trabajo defensivo, sólo la falta de acierto culé en la primera parte ha permitido que el Hércules soñara durante muchos minutos que podía repetir de nuevo la hazaña, máxime cuando Trezeguet ha tenido una ocasión clarísima en la primera parte en la única llegada a puerta en todo el partido.
Porque el partido de hoy del Barça no ha sido muy diferente a, por ejemplo, el del 0 a 8 en Almería, donde a pesar de que no ha sido un gran partido, el partido ha estado controlado en todo momento. El gol de Pedro antes del descanso, quien ya lleva seis partidos seguidos marcando, otro récord, sólo ha hecho que certificar el dominio culé en la primera parte.
La segunda parte ha sido un monólogo total, sin desplegar ningún gran fútbol como en otras ocasiones, el Hércules ha sido incapaz de inquietar la portería de Valdés y el Barça se dedicaba a controlar el partido y a fallar más de una clara ocasión de gol, especialmente un Messi que hoy ha estado muy flojo. Pero el mejor jugador del mundo puede estar 85 minutos muy desafortunado para en cinco sentenciar el solo el partido con dos goles consecutivos.
No ha tenido mucha más historia el partido de hoy, 3 puntos más que meten más presión al Real Madrid que mañana debe ganar obligatoriamente en Pamplona. Pero cuando uno ha hecho su trabajo es mucho más placentero ver que hace tu rival al día siguiente.
Y hoy el Barça de nuevo ha cumplido, con menos brillo, pero con la misma eficacia.
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