"Los equipos, como todo, no son para siempre. Nacen, crecen y mueren". La frase es de Miguel de Merodio, socio cofundador de Skaleno Advisory y asesor de familias empresarias en América. Es parte de su libro: Empresa Familiar: La alquimia del legado. Guía práctica para seguir prosperando juntos.
Ahí dibujó cómo de una crisis nacen oportunidades. "No sólo en las empresas familiares. En los equipos, en las juntas directivas, en todos los grupos humanos con los que trabajamos, son momentos que hay que aprovechar, porque la tensión de la crisis hace que se alineen". Insiste: "A mí no son las crisis las que me dan miedo. A mí me dan miedo los momentos donde tienes unos resultados mediocres pero aceptables y entonces no empiezas a hacer las transformaciones necesarias. Y ahí es cuando poco a poco vas perdiendo valor, casi sin darte cuenta". De Merodio insiste que cuando ese momento llega hay grandes amenazas que empujan a cambiar profundamente. Agregó que su papel como experto ocurre cuando " hay una apariencia de que todo va bien porque no vamos muy mal".
Si cada Empresa Familiar pudiera escribir una hoja de ruta para hacer las cosas bien desde el inicio, ¿qué pasos debería de tomar en su opinión? Para Miguel de Merodio, como experto dice: "hay que ser muy respetuoso con los emprendimientos que terminan siendo empresas familiares, porque lo que hacen muy bien los fundadores es aprovechar una oportunidad en el mercado, dar un servicio, crecer, establecer una compañía". Por eso, aconseja desde el principio: Poner en claro las reglas del juego "partiendo no sólo de lo que necesita el negocio, sino de lo que necesita la persona (familiar que te ayuda)".
"Creo que el peor error que se puede cometer siempre es tratar de ubicar a alguien en una posición donde no vaya a tener exito, pero digamos que que esa es una de las primeras cosas que hay que hacer". En segundo lugar es entender en todo momento cuando la empresa crece y agrega a primos. "Suponen un entorno distinto y un entorno de expectativas distintas, no le puedes pedir lo mismo a tu hermano o tu hijo, o a tu padre, que a un primo segundo tercero". Por eso, De Merodio aconseja: "No sólo en el lado de la familia, sino también en el lado de la empresa: No es lo mismo una empresa que necesita en un momento determinado mucho capital de trabajo, no puede distribuir dividendos que una empresa que ya tiene mucho capital y lleva muchos años sin distribuir dividendos, porque detrás de esas solicitudes o esas o esas expectativas, hay personas con perspectivas distintas; todas respetables"
"No es lo mismo hablar con alguien que sólo es familia, pero no trabaja, no recibe dividendos, no está en las juntas directivas que alguien que tiene todos esos roles, entonces lo primero que hay que comprender es que eso arroja mucha mucha complejidad". De Merodio aconseja poder distinguir conversaciones y sitios donde se tienen esas conversaciones. Ejemplo: cuando un familiar habla como accionista versus un diálogo en el que se habla todos los días en la oficina.
¿Cuáles son los retos más difíciles que ha tenido que enfrentar como asesor de Empresas familiares?"El rol del consultor o el rol del asesor es un rol que no se echa atrás ante los problemas porque el problema no es suyo. Es el problema de la empresa o la familia. Para eso te han llamado a ti, pero no te han llamado para que digas la solución. Por eso yo hablo mucho siempre de la soberanía de las familias. Son ellos los que tienen todo el derecho del mundo a decir cuál es la mejor solución a su problema. A mí me toca darles un proceso ordenado, ayudarles a acompañarles en un proceso para que tengan esos diálogos. Me toca darle referencias sobre como otras soluciones he visto en otros clientes o conozco teóricamente. ¿Desde qué perspectiva se puede ver el problema? Yo les ayudo a ver todo eso, les ayuda a comprender si ha traducirse lo que unos y otros y otros dicen, pero l a clave de nuestro trabajo es precisamente no huir de los problemas, no huir de los conflictos al revés es: ¡Espérate! Vamos a abordar el conflicto, pero asertivamente, porque sólo atravesando el conflicto llegas al compromiso, es decir, sólo cuando entras a un sitio de difícil le entras a un problema, le entras a un conflicto, puedes llegar a un acuerdo. Y es posible que no llegues a un acuerdo, pero no llegar a un acuerdo después del conflicto y ratificar que no estamos de acuerdo eso ya es parte de la de la solución".
De Merodio explicó que le ha tocado incluso acompañar a familias empresarias que ya no quieren seguir juntos en el negocio, pero sí siguieron juntos como familia. "Encontraron que podrían ser excelentes familiares. Y están siendo muy felices cada uno en su actividad (...) lejos de verlo como amenazas, siempre son oportunidades. (...) Aceptar si estamos en un momento de quiebre, donde lo que hay que ayudarles a que cada uno se vaya por su por su lado... sí, sí, nos han tocado situaciones de esas situaciones muy, muy duras". También explicó que ofrece reglas para pelearse en una discusión de empresa familiar. "Yo no le digo a mis clientes no se peleen. Yo les digo: vamos a pelearnos, pero con orden y con reglas para saber de qué estamos hablando y después veamos quién propone una mejor solución para todos".
"Todo el mundo lleva mochilas, los consultores llevan un maletín. Yo traje un maletín de alquimista", dijo a su audiencia. A partir de ahí, el pasado 27 de abril, Miguel de Merodio comenzó a explicar su visión de saber gestionar empresas familiares exitosas.En su libro da pasos para gestionar una Empresa Familiar exitosa. También habla de dejar de buscar un super hombre y buscar un super equipo. ¿Cómo se logra? Primero ,el primer paso es comprender que necesitas un equipo, eso es lo lo primero que puede ser un equipo de familiares. Es decir: somos hermanos, pero vamos a constituirnos en equipo, vamos a actuar como como un equipo, primos lo que sea, pero pero lo primero es ser consciente de que necesitas actuar como un equipo.
Para De Merodio hay tres características básicas muy esenciales para que exista un equipo:
1. Membresía: "Se tiene que estar claro quiénes estamos en el equipo".
2. Debe de haber una claridad en el propósito de para qué está este equipo: "Cuando una familia empresaria define qué es lo que quiere hacer a medio y largo plazo. ¿Qué transformación quiere conseguir que el legado quiere construir? ¿Qué es lo que quiere hacer? Sea lo que sea, incluso vender la empresa o lo que sea. Bueno, ahí hay un objetivo que es para lo que está ese equipo".
3. Tener gente adecuada: "Es la parte más más compleja porque tenemos una tendencia a entender que la gente más adecuada es la gente más corporativa, digamos, o los que tienen más maestría. Y los que tienen el el super currículum y eso no es verdad. En los equipos de ejecutivos son los equipos de familia uno tiene que tener las competencias para hacer su trabajo y tiene que ser bueno en eso, si no, pues ni siquiera llegamos a primera base".
Para De Merodio, con esas tres características se puede construir una visión integral: ser capaz de ver toda la realidad, tus intereses, los intereses del resto, los intereses de todo el sistema.
Fuente https://www.estrategiaynegocios.net/empresasymanagement/cuales-son-las-claves-de-las-empresas-familiares-exitosas-XX8819891