El parto prematuro es el nacimiento del bebé antes del tiempo que le corresponde, generalmente tres o más semanas desde la fecha en que se tiene previsto que nazca. En control médico se puede determinar si existe algún riesgo de parto prematuro.
Los síntomas de parto prematuro se pueden notar porque sucede:
- Dolor de barriga
- Dolor en la parte baja de la espalda
- Contracciones
- Cólicos
- Cambio de color del flujo vaginal o sangrado
- Aumento de secreciones vaginales
- Presión en la pelvis por empuje del bebé
- Contracciones que endurecen la barriga cada 10 minutos
- Rotura de la bolsa
Si los síntomas del parto prematuro suceden antes de las 22 semanas de gestación de lo que se trata es de un aborto, ya que las probabilidades del nacimiento y supervivencia del bebé son muy pequeñas. Si se producen tras esa semana y antes de la semana 37 del embarazo, puede nacer bien, aunque cierto es que cuanto más cerca se encuentre a la fecha del parto mayores posibilidades de supervivencia hay. Más bien es a partir de la semana 34 del embarazo cuando el bebé ya se encuentra maduro como para nacer y desarrollarse sin problemas.
Los mayores factores de riesgo de parto prematuro son las infecciones vaginales y urinarias, las enfermedades de la madre, la raza, las fecundaciones in Vitro, las complicaciones en el embarazo, el peso de la madre o la edad de la madre (menos de 18 o más de 40 años).
Por supuesto, para evitar un parto prematuro, aunque se puede presentar por otras causas, se debe tener una dieta equilibrada y hábitos saludables (no alcohol, no tabaco) y hacer controles en caso de presentar factores de riesgo. Hay que tener en cuenta que el parto prematuro puede presentar muchos riesgos, sobre todo cuando el bebé aún no se encuentra preparado para nacer, y requiere unos cuidados especiales.
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