Cambiar un neumático de coche suele ser una tarea no muy bien asumida por parte de muchos conductores. Aún así, a menudo nos topamos con la necesidad y urgencia de cambiar nuestros neumáticos ante un pinchazo u otro problema en carretera.
Sin embargo, no hace falta tener un pinchazo en medio de la carretera para cambiar un neumático del coche. Existen diferentes motivos por los cuales un neumático debe cambiarse y reemplazarse. A continuación enumeramos cuándo unos neumáticos de coche deben cambiarse:
¿Cómo reconocer el momento de cambiar un neumáticos?
- surcos desdibujados
- signos de envejecimiento
- presencia de cortes o deformaciones
Desgaste: la antigüedad del neumático y el kilometraje de los mismos van desgastando la rodadura trayendo como consecuencia que los dibujos o surcos de la rueda vayan perdiendo definición y profundidad. La seguridad está en riesgo ante el desgaste de los neumáticos, perdiendo capacidad de agarre de las ruedas al pavimento y por ello existe una norma que estipula un límite legal de 1.6 mm de profundidad que obliga su reemplazo. Controla tus neumáticos regularmente.
Envejecimiento: Desde que compras un neumático nuevo, éste se encuentra expuesto a factores que afectan su vida útil como temperatura, velocidad, carga, estilo de conducción, entre otros. El estado de los neumáticos está íntimamente ligado a cuestiones de seguridad por ello se recomienda revisar el estado de los neumáticos tras 5 o más años en actividad. Un factor a tener en cuenta, es verificar la fecha de fabricación ubicado en el flanco del neumático.
Daños: Cuando el neumático enseña un daño en su compostura, es importante reemplazarlo. Este tipo de daños pueden ser: pinchazos, perforación, choque contra un objeto contundente (bordillo, objeto punzante, etc.), anormalidades en lonas o gomas del neumático, aspecto deformado del neumático. Cuando los detectes ¡ya es hora de reemplazar neumáticos!
Revisa el estado de tus neumáticos, y cuida la seguridad vial en carretera.