El libro de Rosen es magnífico. No conocemos nada de aquel mundo porque nosotros estábamos justo en el otro extremo de aquella cultura. Y, sin embargo, su mundo sigue presente entre nosotros. El derecho civil, que deriva del código de Justiniano ha sido una pieza fundamental en los sistemas jurídicos europeos hasta hoy. Pero además, si la voluntad del príncipe tiene valor de ley, como siempre pensó Justiniano, no sólo nos legó ese derecho por el que se rigen las naciones europeas que crecieron el suelo romano; nos legó también la autocracia.
Justiniano era un personaje secundario, un tipo de familia humilde que procede de lo que hoy llamamos los Balcanes (Macedonia del Norte) y de origen posiblemente ilirio. Aún así, se abrió paso en el Imperiogracias a su tío Justino, otro que huyó de la pobreza, hasta llegar a ser uno de los más grandes