La maquinaria del PP –la mayoría absoluta de la que goza el grupo parlamentario popular en el Congreso de los Diputados y en el Senado– ha pasado sobre más de 4.000 enmiendas de la oposición haciendo imposible cualquier tipo de negociación política para modificar las cuentas públicas para el año próximo. De esta forma, el trabajo de los diversos grupos de la oposición parlamentaria para elaborar un total de 4.166 enmiendas al proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2015, los últimos del Gobierno que preside Mariano Rajoy, está condenado al fracaso.
El rodillo del PP sólo permitió algún retoque cosmético al proyecto inicial presentado por el ministro de Hacienda y Administraciones Públicas. Más de 1.300 enmiendas presentadas por los socialistas ya han sido descalificadas directamente por el PP nada más presentarse el pasado viernes por la tarde. El grupo de La Izquierda Plural formalizó otras 800 modificaciones, pero el PP nunca ha admitido ninguna de las enmiendas ni del PP ni de Izquierda Plural. CiU presentó 517 y UPyD, otras 265. El PNV apenas planteó 19, sin duda para no hacer trabajo en balde. El resto de enmiendas corresponden al grupo mixto-
Ningún grupo parlamentario concede la más mínima credibilidad a las cuentas del Gobierno del PP para 2015, calificadas de irreales y electoralistas. Las 98 enmiendas del PP apenas suponen variaciones económicas en las cuentas de Montoro: desde una línea de crédito para facilitar liquidez a comedores infantiles hasta una serie de desgravaciones fiscales a varios acontecimientos deportivos y culturales que se celebrarán en próximo año. Son “puros ajustes electoralistas en determinadas localidades y comunidades. Nada más”, se lamenta la oposición. Las restantes 4.058 enmiendas volverán a los cajones de los distintos grupos de la oposiciónde la misma forma que sucedió en los tres últimos trámites parlamentarios de los PGE. Y ello, pese a las palabras del ministro Montoro con las que acabó y en las que manifestó “la mejor disposición” del Gobierno a estudiar las enmiendas de la oposición. Pero “si llegan a admitir diez enmiendas –se lamenta una diputada–, será todo un milagro”.
El principal grupo de la oposición (el socialista) considera que “estos presupuestos ponen de manifiesto el fracaso de la política económica llevada a cabo por el Gobierno durante los últimos años”. La Izquierda Plural opina que “hay alternativa” a la política económica del PP para salir de la crisis y crear empleo, mientras que CiU estima que “estos PGE no sirven para sacar de la crisis al país”. UPyD se muestra categórica: “Ha sido una legislatura perdida para la recuperación económica”. El PNV añade que son unos presupuestos “electoralistas” con medidas como la devolución de parte de la paga extraordinaria suprimida a los funcionarios públicos en diciembre de 2012”.