Cuando la vida obliga a enrocar: ajedrez, vocación y redención

Para Alexis Murillo no fue una decisión sencilla. Guardar las piezas de ajedrez en su caja de madera —esa que conserva el olor a torneos, análisis nocturnos y silencios densos— significó aceptar una renuncia temporal. Había una asignatura pendiente, impostergable: concluir la carrera de Derecho, postergada una y otra vez por los vaivenes de la vida y del propio tablero. Se ajustó la faja, cambió el reloj por códigos y expedientes, y finalmente, a finales de 2025, alcanzó el título de licenciado en Derecho. Una conquista personal, íntima, de esas que no otorgan puntos Elo, pero sí una profunda satisfacción.

Apenas colgó el diploma en la pared principal de su habitación, ocurrió lo inevitable: regresó al ajedrez. Desempolvó la caja de los trebejos con la ansiedad del que vuelve a casa tras una larga ausencia. El tablero, paciente como siempre, lo estaba esperando.

La tarde de este lunes, minutos antes de arrancar la ronda siete en la mesa uno, conversamos brevemente. Con la franqueza del veterano que no necesita impostar seguridad, confesó:“No aguantaba las ganas de jugar. Me siento feliz, aunque debo decirte que el primer día estaba nervioso, inseguro”.A su lado, María de los Ángeles, su compañera de vida, sellaba la escena con una palmada cariñosa en la espalda, gesto sencillo que decía más que cualquier discurso.

Los resultados hablaron con contundencia. Se consagró campeón invicto del torneo con cinco victorias y dos empates —precisamente ante Mauricio Arias y Juan León Jiménez— para un sólido acumulado de 6 puntos de 7 posibles. Además del prestigio deportivo, el triunfo vino acompañado de un atractivo premio en efectivo que, en estos días de fiestas y gastos acelerados, siempre resulta oportuno.

Para el MI Mauricio Arias, en cambio, la Diosa Caissa mostró su rostro más severo. El abandono competitivo de los últimos años, reemplazado por aeropuertos y agendas apretadas, terminó pasándole factura. Finalizó en la tercera posición con 4.5 puntos, tras caer en la decisiva ronda siete ante Rodrigo Avendaño. Este último, con nuevo look —cabellera recortada— y desafiando el mito bíblico de Sansón, pareció ganar fuerza con el cambio. Avendaño firmó un excelente torneo y se adueñó del segundo lugar con 5.5 puntos, cediendo únicamente ante el campeón y entablando con el joven Bruno Cossio, un talento en proyección que empieza a insinuarse con seriedad en el ajedrez de alto rendimiento.

Clasificación Final después de 7 rondas

Rk.No.Ini. NombreFEDFIDEEloNPts.  

11IMMurillo Tsijli, AlexisCRC225923366

29Avendano Porras, RodrigoCRC197320485,5

32IMArias Santana, MauricioCRC217323514,5

47FMJimenez Molina, Juan LeonCRC200720994,5

510Mata Tencio, RandallCRC192720554,5

TABLA COMPLETA DE POSICIONES

En el Grupo B, la autoridad fue incuestionable. Moisés Romero, joven turrialbeño, alto, delgado, afable y visiblemente enamorado del juego, impuso la ley del tablero con una actuación impecable: 6.5 puntos de 7, invicto. En el gimnasio del Colegio de Monterrey no hubo dudas ni discusiones; fue el mejor y el justo triunfador.

El segundo lugar fue para Brenda Semana, quien sumó 6 puntos de 7. Solo cedió ante Christopher Lezcano y se llevó, además del trofeo, un cheque robusto y con varios ceros. Lezcano, por su parte, completó el podio en la tercera posición, también premiado y con sonrisa amplia, confirmando que el torneo no solo repartió puntos y money, sino historias, regresos y certezas.

Porque al final, como en la vida misma, el ajedrez siempre ofrece una segunda partida. Y esta vez, muchos supieron jugarla.

Clasificación Final después de 7 rondas

Rk.No.Ini. NombreFEDFIDEEloNPts.  

118Romero Cerdas, Moises AlonsoCRC160617156,5

213WCMSemana Ramirez, BrendaCRC163517936

31Lezcano Martinez, ChristopherCRC177220005,5

 TABLA DE POSICIONES

CrChess aprueba con nota alta en su debut organizativo

CrChess, responsable de la organización del evento, superó con creces el desafío en esta primera edición, saliendo airosa y con calificación sobresaliente. La puesta en escena, la logística y el desarrollo competitivo evidenciaron planificación, criterio técnico y una clara vocación por elevar el nivel de los torneos nacionales.

Guillermo Ordoñez, el jefe de filas del proyecto, junto a Jonathan Carvajal y las siempre entusiastas y encantadoras hermanas Núñez —Joshebeth y Neesmy—, demostraron que no se trató de un esfuerzo improvisado, sino del primer capítulo de una propuesta con visión de continuidad. Todo indica que, en su agenda para 2026, ya se están trazando nuevas líneas y reservando espacios para sorpresas adicionales que prometen enriquecer la experiencia de los participantes en la próxima edición.

El listón ha quedado alto. Ahora, la expectativa es clara: consolidar lo logrado y volver a mover las piezas con ambición renovada.

AMPLIA Y GENEROSA GALERIA...CREDITO DE NEESMY NUÑEZ. CALIDAD DE FOTOGRAFA.  PIQUE ENCIMA.

Publicado en pasionajedra.com