Porque decir gathijos o perrhijos ya no es suficiente, pues ahora mascotas hay de todo tipo; desde tortugas, aves, rumiantes, roedores entre muchas especies, las personas hoy en día deciden cada vez tener un compañero animal y darle un trato casi similar a un hijo pero porque se da?
Analicemos un momento:
Cualquier animal que entre en la categoría de mascotas debería ser alguien de tamaño no superior al nuestro; de preferencia manso, y que sea una criatura con la que podamos contar a la hora de tener nuestros momentos de esparcimiento como paseos o situaciones de ocio.
Algunas mascotas también guardan secretos pues sus dueños les cuentan cosas y hablan con ellos.
Pero sea como sea estas criaturas al igual que un niño demandan cuidados, necesitan y son dependientes de sus cuidadores ya que en algunos casos muchos de estos animales ya no son capaces de reintegrarse en la naturaleza por lo que sería difícil para ellos poder encontrar alguna forma de defenderse y alimentarse.
Al igual que un niño necesitan cuidado, guía y educación, obviamente todo esto para convivir con nosotros y con otros animales en la casa según sea el caso.
Pero y entonces que puede motivar a una persona a querer transformar su mascota en casi un hijo?
No todas las personas desean reproducirse, eso es un hecho que se ha estado dando mucho en la época actual, cada vez son más las mujeres y hombres que se sienten a gusto criando un perrito, gatito o canario en lugar de un hijo.
Esto debido a varios factores que entre ellos son:
Falta de dinero:
Para formar una familia necesitas acomodamiento de todo tipo, no debe faltar el dinero lógicamente y cuando nos vemos acorralados con este requisito es un hecho que prefieren pasar de largo con el asunto de tener hijos.
Falta de pareja estable:
Al igual que el punto anterior muchas personas preferirían recorrer el camino de la paternidad con algo de ayuda no solo económica si no espiritual y sentimental, no hay madre o padre soltero que pueda negar que criar uno o varios hijos completamente solos es difícil mas no imposible pero siendo las mascotas una alternativa más barata y menos complicada, a parte que una mascota no te hace extrañar una pareja tanto como cuando tienes hijos pues bastaría solo con tu cuidado.
Es un llamado que no todo el mundo atiende:
La paternidad o maternidad es como un llamado, claro está que hay personas que tienen sus hijos por situaciones que en algún momento se salieron de sus manos pero dejando de lado este punto hay quienes no parecen interesarles o sentirse atraídos a la idea de tener un descendiente, por ello una mascota podría rellenar ese deseo de compartir tu vida con otro ser de una manera amorosa y casi familiar.
En mi caso soy una persona que hasta el día de hoy nunca he cambiado pañales ni tenido la oportunidad de cuidar niños desde pequeña, es por eso que fácilmente podría escoger cualquiera de las tres razones anteriores más aun así no reemplazaría la idea de una mascota por un hijo, pero soy consciente de que hay quienes llevan esa relación de humano-animal a un nivel un poco más personal hasta el punto de familiarizar esa criatura.
Y como cuarta opción:
Hay quienes desean tener hijos pero no pueden: y si bien es cierto para eso están los centros de adopción entre otras alternativas hay personas que prefieren la compañía de una mascota para experimentar inconscientemente como sería el rol de un padre o madre, poder vivir la responsabilidad de criar educar y cuidar de un ser indefenso y más pequeño que ellos.
Las mascotas también tienen un papel importante en nuestras vidas, piensa por un momento por ejemplo en un anciano que no puede ya procrear ni tiene la capacidad de cuidar o adoptar ya a un niño por evidentes razones como la edad y la condición de salud, una mascota podría fácilmente rellenar ese hueco de soledad que tiene y podría alargar su esperanza y ganas de vivir.
Muchas veces las mascotas también pueden ayudar a personas especiales con discapacidades y con fobias sociales las cuales hacen que un ser se sienta completamente aislado de otros humanos, que mejor manera de intentar salir de su caparazón cuidando de una criatura que no representa la forma humana a la que tanto le temen?
Humanizar una mascota no siempre se da por gusto a veces esto nace de una carencia emocional interna que no puede ser removida o reemplazada tan fácilmente.
Esto también nace porque la gente ha abierto su conciencia y van entendiendo que nadie está por encima de nadie y que un perro, un gato, un pez o una gallina se vean pequeños e inferiores no significa que en realidad lo son y es que la tarea espiritual que acompaña cada uno de estos animales es tan grande que somos nosotros quienes debemos respeto y amor a semejantes seres que todo lo dan y no piden nada a cambio.
Querer a una mascota o a un animal como a un semejante no es sinónimo de capricho si no de igualdad.