Cuando los recuerdos se convierten en Alien Attack

Prueba este nuevo matamarcianos para MSX

A pesar de todo lo malo, la cuarentena a causa de la covid-19 ha dado mucho juego (nunca mejor dicho), y un ejemplo de ello es este Alien Attack realizado por un usuario llamado Marcos Daniel Blanco (cbsfox), quien reconoce que nunca antes había realizado nada para para el micro MSX. Un verdadero crack que se ha marcado el código en tan solo 7 días, ni más ni menos que en ensamblador.

Eso fue hace tres meses ahora el juego ha recibido mejoras significativas con la ayuda de otro usuario de MSX, Daniel Simón (Def Danny), las mejoras han llegado en el aspecto gráfico, añadiendo nuevos sprites, tiles y mejorando la intro del juego. Los cambios añadidos a la faceta de audio tampoco se ha quedado atrás, con nuevos efectos de sonido y música. En lo referente a la jugabilidad se han añadido extras como powers, láser, campos de energía, disparo de enemigos, más niveles...

El objetivo del juego es muy simple matar, matar tanto que te duelan los dedos de aporrear la barra, pero matar deprisa, puesto que el tiempo transcurre en tu contra. ¿Y qué te proporciona todo ese esfuerzo?, puntos y más puntos, con los que fardar de mejor jugador. El juego me ha recordado mucho al grandioso Zanac de 1986 de Pony Canyon...Me gustaría saber si ha influido en algo, sería una alegraría confirmar que así fuese.
De vez es cuando está bien recordar cómo se te seca la boca, mientras realizas gestos irrepetibles con tu cara, sentir como acompañamos a ese sprite que nos representa en pantalla replicando sus movimientos con nuestro cuerpo, como si eso sirviera de algo🤔. Estás cosas solo son reproducibles en los viejos juegos de "naves" de los añejos micros 8 bit.

Alien Attack sigue en constante desarrollo gracias a la colaboración surgida entre estos dos usuarios de diferentes culturas pero con el nexo de unión de los videojuegos. Es significativo como algo que nos obliga a estar en casa une países en la elaboración de un juego, en este caso Alemania y Brasil, de donde proceden los autores del mismo. ¡Gracias a ambos por vuestro esfuerzo!
Por: Óscar