Eso, odio cuando no tengo nada que contar. Cuando no tengo nada de lo que quejarme, por muy tonto que sea. Al no quejarme de nada parece que el mundo va bien, que no veo nada que me haga decir "fuuuu".
Pues no, claro que veo cosas, claro que me pasan cosas. Pero, seguro que la han tenido, esa sensación de no saber cómo escribirlo.
Pues eso, precisamente, es lo que me ha pasado a mi. Hay cosas de las que estoy hasta los huevos, pero no se cómo escribirlo. Aunque, bueno, ya se me pasará.
Umm, no se cómo acabar esto. Pondré un fuuuu y haré una retirada estratégica xD.
¿No os ha pasado?