La mayoría de nosotros nos proponemos practicar CrossFit para cambiar nuestro modo de vida. Ya se trate de nuestra salud, nuestro cuerpo o nuestra alimentación, pero además queremos ver un cambio. Ya que vamos al box todos los días, esperamos ver resultados pronto. No queremos perder la esperanza. Saber en cuánto tiempo veremos resultados evita que nos rindamos y nos mantiene motivados a largo plazo.
Pon atención al proceso, los resultados vendrán
El cuerpo y su metabolismo son una máquina compleja. La forma en que hemos tratado a nuestro cuerpo en el pasado tiene un gran impacto en el cambio de dirección que hemos dado al empezar CrossFit. Tampoco queremos repetir los intentos fallidos del pasado y rendirnos al cabo de un mes. Lo bueno con el CrossFit es que no tendremos tiempo de pensar en los resultados mientras lo estamos practicando. Durante esa hora que pasamos en el box lo vamos a dar todo, y hasta el día siguiente, cuando volvemos, nos vamos a centrar sobre todo en la recuperación, que es el primer elemento que nos puede garantizar el éxito a largo plazo.
Recuperación total
A lo largo de las semanas de entrenamientos de CrossFit probablemente habrán habido días en los que nos hayamos dormido antes de cenar o hayamos tenido dificultades para subir las escaleras de casa debido a al cansancio o las agujetas. Estas situaciones son completamente normales. Reflejan el duro trabajo que dedicamos a nuestros entrenamientos.
Aunque estas situaciones suenen divertidas y graciosas, son cosas que deben tomarse en serio. Para que el cuerpo se recupere, se recomiendan entre 7 y 8 horas de sueño de calidad por noche y beber al menos 2-3 litros de agua. También debemos respetar el patrón de entrenamiento. Por ejemplo si quieres entrenar 5 días, serían alternando descansos de la siguiente forma: 3 entrenamientos, 1 día de descanso, 2 entrenamientos, 1 día de descanso.
El descanso es tan importante como la constancia.
La coherencia es la clave
Los resultados se obtienen con trabajo duro, sobre todo si pensamos en cambiar malos hábitos arraigados. Para comenzar e ir pasando la fase agujetas, nos puede servir, pero para querer ver unos cambios, uno o dos entrenamientos a la semana no son suficientes. Quizás, si somos impacientes debamos de realizar 3 ó 4 entrenos, no necesariamente todos de crossfit. Uno de estos cuatro puede ser salir a correr suave. La idea es hacer del CrossFit un estilo de vida. Al cabo de un tiempo no querremos pasar ni 3 días sin hacer ejercicio.
Esta es la parte más difícil, pero con la comunidad y el increíble ambiente que reina en un Box de CrossFit, es más fácil de conseguir que en un gimnasio convencional.
Números generales
Para que aparezcan cambios sustanciales, con esto no hablamos de tener unos abdominales como panes o un glúteo bien duro y subido; debes estar haciendo ese esfuerzo que se requiere, debes sentirte agotado y con ganas de comer mucho después del entrenamiento. Por norma general, a los 20 días de realizar cambios en nuestras conductas, aparece el hábito, que se traduce en la pérdida de esa sensación de esfuerzo y lucha para instaurar algo en nosotros. Si tenemos esto presente, en nuestro cuerpo los tiempos no andan desencaminados, puesto que al mes, cuatro semanas de llevar bien los entrenos y la dieta, vas a notar como algo ha cambiado. Has cambiado y tu cuerpo te lo está haciendo notar. Estos cambios variarán en función de tus antecedentes deportivos, de lo duro que te exijas en los entrenamientos y de cómo lleves tu vida fuera del gimnasio. Si se cumplen todos los criterios, es imposible que no veamos cambios pronto.
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