Obviamente, un ciclista más delgado correrá a más velocidad que otro con más grasa en el cuerpo. Igual pasa en las carreras. Pero ¿cuál es el límite?
El límite es la pérdida de energía: si estás más delgado pero disminuyes tu producción de energía entonces no estás haciendo bien las cosas. Debería significar que menos peso equivale a mayor velocidad y a una energía constante. Cualquier cosa diferente a eso es pérdida de salud.
Muchos ciclistas aficionados no toman en cuenta el factor de la buena salud, y creen que perdiendo peso al extremo van a mejorar sus tiempos. No ocurre así. Por el contrario, pierden peso pero también pierden su salud y su rendimiento, y por lo tanto habrá que revisar los métodos que utilizan y el objetivo de adelgazar.
Equilibrio siempre
Primero, debes preguntarte para qué quieres perder peso y cuál es tu objetivo en tu práctica de ciclismo, si realizar una prueba de perfil llano o de montaña. Ten en cuenta que mientras más llana es la prueba el peso no será tan definitorio, al contrario de lo que sucede con la prueba de montaña.
Pero antes de hacer cualquier cambio en tu peso debes medir tu potencia en la bicicleta, y para ello usar un medidor de potencia es lo mejor, pues te permitirá controlar y monitorear los valores en el tiempo. Esto con el objetivo de no perder peso y potencia (en este caso sólo debes disminuir tu peso corporal, pero tu potencia o debe aumentar o mantenerse).
Lo que debes pesar es lo que te permite cumplir tu objetivo como ciclista de spring o escalada, y no hace falta tener grandes músculos para ello.
Y si hablamos de grasa, hay niveles mínimos para estar sanos que si no se tienen no vale de nada ningún esfuerzo que se haga. Aparte del tema estético, un atleta hombre debe tener como mínimo entre 6 y 13% de grasa, y una atleta mujer entre 14 y 20%.
Los rangos mínimos para el hombre son entre 2 y 5% y para la mujer entre 10 y 13%, por debajo de esos valores la salud corre riesgos. Hoy en día es bastante fácil medir la grasa corporal, hay diversos métodos disponibles, pero la mejor manera es cómo te sientes al montar bicicleta.
La salud ante todo
Cuando se habla de rendimiento deportivo se alude al equilibrio existente entre el rendimiento físico y la salud. Cuando se pierde demasiado peso la salud puede verse seriamente afectada.
En el caso de las mujeres, una pérdida excesiva de peso puede generar la desaparición de la menstruación y de su densidad ósea -esto último también puede afectar a los atletas hombres. Asimismo, el sistema inmunológico de ambos sexos puede verse seriamente comprometido.
Por desgracia, es un peligro muy tangible para los ciclistas aficionados, que quieren copiar modelos profesionales sin tener el respaldo de equipos nutricionistas que los guíen en esa pérdida de peso para lograr más velocidad. Y terminan con trastornos alimenticios o enfermedades que no deberían padecer.
Por lo tanto, si empezaste a hacer ciclismo y te has obsesionado con el peso, nuestro consejo primordial es que revises cuidadosamente cómo vas de salud. Muchas veces los chicos jóvenes reciben mensajes contraproducentes en el sentido de que deben perder peso para mejorar como ciclistas, cuando en realidad deben estar pendientes de aumentar su energía y su potencia. Hay edades en que resulta muy delicado el tema de la restricción calórica.
¿Y cuál es la clave entonces?
Lo importante acá es mantener un índice de masa corporal (IMC) equilibrado. Los ciclistas profesionales pierden peso en zonas específicas del cuerpo; fíjate por ejemplo en Chris Froome, uno de los mejores contrarrelojistas y escaladores que hay actualmente, medallista olímpico y considerado como uno de los corredores más fuertes en carreras por etapas.
Si ves a Froome de la cintura para arriba, verás a un hombre casi anoréxico, pero si lo ves de cintura para abajo te sorprenderás: tiene unas piernas impresionantes. Y es lógico: su desempeño en el ciclismo hace que optimice su masa muscular. No necesita grandes músculos en los brazos, pero sí en las piernas. Tiene un IMC totalmente equilibrado.
Para mantener un buen rendimiento sólo sirve el esfuerzo continuo, el trabajo duro y el tiempo que se pasa en la bicicleta haciendo todo esto. Combinar la frecuencia con ese trabajo duro termina en un mayor rendimiento (esto como consejo para los ciclistas aficionados).
Si no estamos en equipo ni tenemos compañeros que vayan tirando de nosotros, al estar en una escalada y no tomamos el turno adelante, lo más probable es que terminemos empujados a una zanja antes de llegar a la subida.
¿Qué significa esto? Que es mejor ocuparse de ser el mejor ciclista todo terreno que se pueda llegar a ser, enfocarse en una adecuada nutrición en el día a día y en hacer un correcto entrenamiento. Es decir: las escaladas mejor dejárselas a los profesionales.
Pero si necesitas o quieres perder más peso, la clave está, pues, en perderlo lentamente y de manera constante.
Guía nutricional
Debes seguir una guía nutricional que te indique los micro y los macro nutrientes que le proporcionas a tu cuerpo para que éste funcione, pero no más de los que necesita. Así, tu cuerpo va a consumir la grasa innecesaria.
Deberás también entrenar diariamente y pesarte una vez a la semana. Esto es imprescindible para controlar si mantienes tu rendimiento a medida que adelgazas, o si por el contrario disminuye.
Y lo importante, a fin de cuentas, es que te des cuenta y pienses en por qué te metiste en el ciclismo: ¿fue para bajar de peso, comenzar a hacer alguna actividad física, porque te gustaba mucho? Sea cual sea el motivo, seguro no era para que te obsesionaras con el peso o con el rendimiento.
De modo que sí, hay que estar delgado para ser ciclista pero en un nivel sano, que no afecte ni tu rendimiento y mucho menos tu salud.