Durante los meses de otoño e invierno en los que frío recorre las calles surgen en algunas ciudades los puestos de castañas asadas, un fruto seco que despide un olor muy agradable cuando se asa en las brasas y que sirve como reclamo, ahora bien, si te das el capricho de comprar un cartucho, ¿sabes cuántas calorías tienen las castañas asadas?.
Antes de que empieces a agobiarte o te mosquee la idea de no poder disfrutar de unas ricas castañas asadas calentitas te cuento que traemos buenas noticias, ya que aunque se trata de frutos secos, las castañas tienen una propiedades muy saludables.
La mitad de su contenido es agua, por lo que tienen un poder calórico bajo y unos niveles de carbohidratos parecidos a los cereales, de hecho antaño se secaban, se molían y usaban como harina para hacer el pan de los pobres. Estos frutos secos provienen de los castaños, que suelen crecer por el norte de España, en regiones como Galicia, Cantabria o Asturias.
Cuando se caen de los árboles comienza un proceso de transformación que convierte los carbohidratos en azúcares (lo mismo ocurre cuando las asamos), por eso conviene esperar al menos una semana antes de consumirlas si se acaban de caer del árbol, estarán más ricas.
Otros frutos secos más calóricos
En cuanto a las grasas, representan menos del 2% del total, nada que ver con las nueces o las almendras que se componen en más de un 50% de lípidos. Para que te hagas una idea más precisa, cuando comes unos 100 gramos de castañas éstas te aportan apenas 200 kcal, en cambio 100 gramos de nueces serían más de 600 kcal.
La única pega de las castañas asadas es que al cocinarlas pierden casi todo su contenido en vitamina C y ácido fólico, por tanto, si no tienes alergia a este fruto seco, te recomendamos disfrutar de las castañas asadas, un opción mucho más saludable que otras opciones de picoteo.