De esos que te tragas para que no se dé cuenta de que te mueres por besarla, por acariciarla, por rozar sus pensamientos con la yema de tus dedos, por escuchar cada uno de sus sentimientos con tu piel despierta, por desvanecerte dentro de sus infinitas miradas de mujer salvaje y eterna…
Un Suspiro de los que el viento se lleva muy lejos… Tan lejos que nadie osaría ir a buscarlo porque se perdería en el intento.
Un Suspiro de los que se encierran en el baúl de los secretos… Secretos que cuando son ‘desvelados’, la noche se llena de luces, de sombras y estrellas errantes. Todas deseando SER… por fin reSUELTAS.
Un Suspiro que se derrama en el Silencio para no ser descubierto. Que se disfraza de Sueño de los de ‘quizás algún día’. Que vaga moribundo entre besos ajenos por si aparece alguna fisura y se puede colar Dentro.
¡Cuanto Amor hay encerrado en un ‘Te Quiero’ no expresado!
¿A dónde irá ese temblor que aparece cada vez que la miras y te congela la razón? ¿Bajo qué sábanas se abrigarán las lágrimas que ahogan tus ganas de abrazarla? ¿Quién será el amante bandido que te robe las migajas de tu Corazón herido?
Los latidos escondidos son malos consejeros. Te guían hacia laberintos repletos de salas de espera de las que nunca sales y jamás te encuentras. Te susurran fantasías tan reales que te duermes respirando los múltiples orgasmos que te mojan de alevosía y ensañamiento, y los polvos que te echa tu propio remordimiento. Tan mágicos como fugaces. Tan extáticos como ‘si te he visto no me acuerdo’. Tan espléndidos como miserables.
Y te quedas rendida ante tus mentiras de pacotilla con tal de que tus Ojos de ‘ciega enamorada’ no la pierdan de Vista.
Pero es que es tan Bella, pisa tan fuerte y camina tan dulce por cada una de sus heridas, que no eres capaz de abrirles la puerta a las mariposas que te hacen sentir tan alocadamente llena. Porque si se van volando, también se la llevan a Ella. Y aún no puedes. Aún no… Es demasiado pronto para abandonar ese dolor que te mantiene tan cerquita de su Esencia. Tan envuelta en el perfume de su Voz.
Quieres sufrir un poquito más con su Ausencia y seguir poniendo ‘patas parriba’ esa Vida que tenías tan dormida. A ver si así, cuando su recuerdo te deje tirada por tanto agotamiento y desesperación, puedas agarrar con las dos manos cada Suspiro que emane de tus entrañas y Amarlos de nuevo con toda tu Alma. Sin ningún tipo de condición. En absoluta rendición.
De momento, no estoy preparada para deshacerme de todo el caos que me provoca.
Prefiero seguir buscándola entre mis más profundos anhelos y mis tan evidentes ‘echares de menos’.
Aunque Ella siga sin darse cuenta… Aunque Ella, ni tan siquiera me Vea.
Quizás, algún día, en otro no-tiempo, con un cuerpo distinto, una nueva Energía y unas Alas más veloces… pueda alcanzarla.
‘QUIZÁS… ALGÚN DÍA’
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