Daniela nos ha enseñado, comparándo con otros objetos, cuánto vale un tractor.
Como nos ha dicho, los precios varían dependiendo del modelo de tractor, su tamaño, su potencia, su equipación…
El primer tractor, el más grande y potente, vale como una casa.
El segundo, más pequeño, como un todo terreno.
El más pequeño vale como un coche.
Y el más antiguo tiene un valor sentimental, es decir, es muy valioso pero no por lo que vale, sino por lo que significa para su dueño…
¡Qué buen trabajo!