Revista Viajes

Cuenca romana

Por Tierrasinlimites @tierrasnlimites

Segóbriga Cuenca Yacimiento de Segóbriga en Cuenca

Hay que utilizar la imaginación. Eso y conocer parte de la historia. Solo entonces, cuando tienes unas ruinas delante puedes apreciarlas, comprender su importancia y reconstruirlas en tu cabeza. Es, en ese momento, cuando de las piedras surgen los muros, aparecen los tejados y las columnas se revisten de mármol. Nos vamos hoy a Cuenca, a descubrir su pasado romano a través de algunos de los yacimientos más importantes de la Península Ibérica. Empezamos en Segóbriga.

Segóbriga

Este yacimiento arqueológico, emplazado en el cerro Cabeza de Griego, en la localidad de Saelices alcanzó su máximo esplendor entre los siglos I y III d.C. Su importancia está vinculada con las explotaciones mineras de lapis specularis, un tipo de yeso traslúcido que se utilizaba durante el imperio romano para las ventanas.

En la visita a este parque arqueológico podemos entrar al Centro de Interpretación, el lugar ideal para entender la importancia histórica del enclave, ver reconstrucciones de cómo era Segóbriga a través de sus paneles explicativos y apreciar algunas piezas originales de la época, entre las que destacan mosaicos, esculturas y otros restos encontrados en las excavaciones arqueológicas.

Ya en el exterior se puede visitar el camino de entrada a la puerta principal, los edificios para espectáculos (teatro y anfiteatro), el foro, un aula basilical, un conjunto termal, una vivienda… así hasta 16 construcciones a pesar de que tan solo el 15% del cerro está escavado.

La entrada general cuesta 5€, aunque hay descuentos para determinados colectivos y días donde la visita es gratuita. Los fines de semana en determinadas épocas del año se puede hacer una visita guiada incluida en el precio de la entrada.

Más información en la web de Patrimonio de CLM

Segóbriga Cuenca

Yacimiento de Segóbriga en Cuenca

Valeria

Es una de las tres ciudades romanas de la provincia de Cuenca, que vivió su momento álgido en el siglo I d.C. tal y como muestra los restos de su foro, uno de los más completos encontrados en la Península.

Aprovechando el enclave y para promocionar este yacimiento arqueológico se organizan cada año unas Jornadas Romanas que incluyen teatro, talleres, cenas de época, desfiles de legionarios… Además de su lado popular, estas jornadas son un importante encuentro para expertos en la materia.

Muy cerca de la Ciudad Romana, en lo alto del cerro, se pueden ver los restos del antiguo asentamiento medieval de Valeria: la ermita de Santa Catalina, la muralla, un aljibe y descubrir unos miradores desde los que admirar todo el entorno. Merece la pena dedicar un tiempo a la naturaleza que rodea la ciudad romana. El río Gritos a su paso ha ido trazando hoces entre paredes y hoy, una ruta senderista, la SL – CU – 03, une, a lo largo de 6 kilómetros, el pueblo de Valera de Abajo con el yacimiento romano. En el camino atraviesa una ZEPA, una zona de protección para las aves; los amantes de la ornitología pueden pasar horas y horas en el trayecto.

No acaba aquí la cosa porque, aunque resulta sorprendente, en el pueblo actual (Valeria también) se pueden seguir admirando los restos romanos; ¿dónde? en su iglesia parroquial. Posiblemente se levantó sobre una construcción romana previa y el edificio integra columnas de estas épocas, la pila de agua bendita aprovecha restos romanos y además, su interior, se ha convertido en museo.

Más información sobre Valeria.

Hoces Gritos

Las hoces del Río Gritos

Yacimiento de Valeria

El yacimiento de Valeria

Iglesia de Valera

Interior de la Iglesia de Valeria

Pila de agua bendita de la iglesia de Valera

Pila de agua bendita de la iglesia de Valeria

Iglesia Valera

Exterior Iglesia Valeria

Ercávica

La tercera ciudad romana de la provincia se encuentra en el municipio de Cañaveruelas, cerca del embalse de Buendía. De aquí parte una de los pocos senderos de Gran Recorrido de la provincia, el GR163, la Ruta del Cristal de Hispania, un camino que aprovecha la antigua calzada romana y atraviesa Cuenca mostrándonos el recorrido que hacían los romanos para llevar el lapis specularis desde las minas a la costa donde se subía a los barcos para repartir el mineral por la Antigua Roma.

Minas de Lapis Especulari

El pasado romano de la provincia de Cuenca no habría sido tal sin este mineral: el espejuelo o lapis specularis, por eso, la Diputación de Cuenca ha apostado por la puesta en valor de las antiguas minas y, hoy en día, trabajan para acondicionar la visita de la mina de “La Mora Encantada” en el pueblo de Torrejoncillo del Rey. El lapis especularis, se utilizaba en el imperio romano, antes de que se inventase el cristal, para tapar ventanas.

En el exterior, en lo alto del cerro, un pozo reconstruido nos muestra cómo se explotaba antiguamente este mineral y dentro, se puede recorrer parte del kilómetro de las galerías.

Todavía no está habilitada para las visitas, aunque si se contacta con la Asociación de Cuevas Turísticas Españolas, te la pueden mostrar.

Minas de Lapis Specularis

Minas de Lapis Specularis en Torrejoncillo del Rey

Minas de Lapis Specularis

Minas de Lapis Specularis en Torrejoncillo del Rey

Dinosaurios conquenses

No son de época romana sino mucho más antiguos. Los huesos de dinosaurios que se encontraron en Lo Hueco, haciendo las obras del AVE, se están estudiando en Cuenca, en la capital. La escuela taller que se encarga del trabajo saca y limpia con mimo cada uno de estos restos. De momento no están expuestos, y solo se pueden ver en algunas jornadas de puertas abiertas, pero de aquí a un tiempo quieren mostrarlos en algún museo, así que actualizaremos en próximas entregas. Donde sí que es posible descubrir algunos de estos saurios es en Japón, hasta allí ha viajado este año Pepito, un “concavenator corcovatus” sacado de Las Hoyas, otro de los yacimiento paleontológicos de la provincia de Cuenca.

Huesos de saurio de

Huesos de saurio de “Lo Hueco” en Cuenca

Huesos de saurio de

Huesos de saurio de “Lo Hueco” en Cuenca

Muchas gracias a Diputación de Cuenca y a José María Íñigo por invitarme al viaje de prensa donde pude descubrir todas estas maravillas, a Aceites La Almenara por la visita a sus instalaciones y a La Finca La Estacada por su acogida y las catas. Seguimos con Cuenca en próximas entregas…

Aceites La Almazara

Aceites La Almazara

Finca La Estacada

Finca La Estacada

 

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