Esta historia comienza el 9 de julio del año 57 en una barriada de alguna ciudad de un país latinoamericano, allá en lo alto del cerro vivía Elena joven y bella pero sin estudios, estaba embarazada de Luis tres años mayor que ella, ambos venían del interior del país, buscando un mejor futuro, se casaron muy jóvenes a causa del embarazo de Elena, ella contaba con ocho meses y tres semanas de embarazo.
Elena era artesana, Luis policía, ninguno de los dos era feliz, ella era pobre pero según Luis quería vivir como rica, él un pobre conformista según ella. Llego el día y como a las dos de la tarde Elena sintió dolores de parto, estaba sola pues Luis se encontraba de guardia, ella preparó sus cosas y como pudo llego al hospital más cercano , donde a las nueve de la noche nació su primer hijo o mejor dicho hija a la que le puso Estela, era hermosa. Elena estaba atontada con el rostro de su bebe. Por fin pudo comunicarse con Luis quien al enterarse de que su primogénito era hembra perdió el interés y decidió que iría a conocerla al día siguiente.
Eran las dos de la tarde del 10 de julio cuando Luis entro al cuarto donde estaban Elena y Estela, en su cara se apreciaba la desilusión, no esperaba a una hembra sino a un varón. Elena le pedía que cargara la bebe pero él se negaba constantemente alegando que podía lastimarla. Allí comenzó esta historia frente a la inconformidad de ambos , ella siendo una pobre inconforme con su vida de pobre, soñando con aquella buena vida que tendría después de abandonar su pueblo. El inconforme con su esposa pues se vio obligado a casarse por un embarazo y para completar, pensaba que su mujer era tan insulsa que ni siquiera le dio el hijo varón que él esperaba, para él su sacrificio no había valido la pena.
Pasaron los años Estela tenía cuatro años, pero a pesar de su corta edad comprendía que algo andaba mal con sus padres , un día presencio una disputa por causa del colegio que Elena había seleccionado para inscribir a la niña, un privado ya que ella merece lo mejor, para Luis muy costoso no podía con los gastos de la casa, la verdad era que el tenia un segundo hogar con una mujer mayor que él; la cual tenía dos hijos y era obvio que se veía apretado para cubrir los dos hogares. Sin embargo Elena con el dinero que ganaba de sus trabajos artesanales decidió inscribirla.
En diciembre del año 61 Elena le dio emocionada la noticia a Luis “ estaba nuevamente embarazada” , el se emociono, era su segundo hijo, aunque le comunico que se verían mas apretados económicamente pero ella como siempre lo ignoró, pasaron nueve meses y en septiembre del 62 nació Luis Enrique , Luis el padre estaba que no cabía de la emoción, gracias al nacimiento de Luisito, le compraron a Elena una cocina de cuatro hornillas, lavadora, una cama matrimonial, pues hasta ese momento dormían en una cama simple, por primera vez su esposo le dio flores , entonces ella pensó que por fin sería feliz pues su esposo la amaba, pero nada más lejos de la realidad.
Se amaron tanto esos días que olvidaron guardar el reposo y lo más importante cuidarse, entonces Estela con cinco años y Luisito con dos meses , esperaban un nuevo hermano, esta noticia acabo con la felicidad de la pareja , Luis comenzó nuevamente a realizar guardias más seguido, pensaba que el dinero no alcanzaría, – ya seremos cinco -le propuso a Elena abortar pero ella se negó, las peleas aumentaron, Elena tenía que trabajar muy duro haciendo sus artesanías y vendiéndolas para poder costear los gastos, ella las vendía en el mercado municipal , dejaba a Estela vendiendo en una esquina donde pudiera verla y ella vendía en otra.
En el año 63 específicamente en agosto nació Ana, era grande y fuerte la bebe. El tiempo transcurrió Estela tenía diez años, Luis Enrique cinco y Ana cuatro años, a su padre lo veían muy poco pues siempre estaba de guardia, Elena estaba amargada, veía que el tiempo pasaba y sus sueños de una buena vida estaban cada vez más lejos, cada mañana se levantaba mas hastiada, pensaba_ tengo tres hijos, prácticamente no tengo marido, vivo en este rancho miserable_ cada tarde después que los niños llegaban del colegio debían ir al mercado a vender las artesanías .
Las pocas veces que Luis venia a la casa lo hacía tarde y borracho cosa que Elena odiaba, pues su padre era alcohólico y ella creció viendo a su madre sufrir a manos de ese viejo borracho como ella lo llamaba. Cansada de ver a su madre golpeada y de esconderse cada vez que su papá llegaba a casa ebrio , busco refugio en Luis quien era un joven atento, distinto, que según ella la quería , de allí que decidiera hacer una vida con él y para poder amarrarlo se embarazo, pues así su vida cambiaria , nada más lejos de la realidad.
Una tarde estando en el mercado una vecina la señora Florencia vio a Elena vendiendo sus artesanías y se acerco a expresarle que sentía mucho que Luis la hubiese dejado, con tres niños. Elena se quedo fría y le pregunto a que se refería, ya que Luis y ella estaban juntos, solo que debido a su trabajo él no estaba casi nunca en casa. Florencia con un gesto de vergüenza en la cara le explico a Elena que ella lo había visto en varias ocasiones por los lados de su trabajo con una señora mayor que él. Elena sentía que el piso bajo sus pies se desmoronaba, ahora entendía por qué tanta ausencia, por que desde hace tiempo sus labios se habían secado a falta de un beso, entendió el cansancio de Luis y porque al tener sexo el no la acariciaba. Supo por qué no alcanzaba el dinero y volteo a la esquina donde estaban sus hijos, sus tres pequeños vendiendo artesanías,_ mis niños _ pensó _ acá vendiendo porque a papá hay que ayudarlo_.
El corazón de Elena se oscureció junto con su alma, su sangre ya no recorría sus venas y sus arterias, se había congelado, pensaba: cómo enfrentarlo. A la mañana siguiente fue hasta su trabajo aprovechando que sus hijos estaban en el colegio, la noche anterior no durmió, la paso llorando, de eso Luis se percato al verla a los ojos y notarlos hinchados, le pregunto si había pasado algo con los suegros, o con los niños, ella lo negó con un movimiento de cabeza. Necesito hablar contigo_ le dijo. Luis la llevo a un cafetín cercano pero le aclaro que debía ser rápido, al llegar al lugar se sentaron cerca de la entrada el pidió café con leche, ella nada y comenzó la conversación que se fue tornando en discusión debido a que él negaba todo, pero llegó un punto en que él lo acepto. El corazón de Elena se partió, era cierto, él la engañaba, ¿desde cuándo? _preguntó, el respondió que desde que Estela tenía dos años. ¿Por qué? El motivo es que me case por tu embarazo, yo no quería casarme y tú me obligaste, luego no me consultaste y saliste nuevamente embarazada, estuvo bien pues nació Luisito, pero nuevamente te embarazaste no te interesó que yo no quisiera más hijos, nunca te importó mi opinión, era lo que tú decías, no me escuchabas.
Elena lo escucho por primera vez y solo le dijo: _ entonces no quisiste nunca ni a mí ni a tus hijos, ¡bien! Luis iba a agregar algo… pero ella no lo escucho y se limito a decirle: ve mañana a buscar tus cosas en la mañana, que ellos están en clase, yo tampoco voy a estar para que no te sientas incomodo. Esa tarde no fue a vender al mercado, busco sus tres hijos, paso luego a la farmacia, llego a su rancho les preparó una comida muy rica, los mando a bañar temprano, luego les dio a eso de las cinco un jugo.
A la mañana siguiente siendo el seis de junio del 69, a las diez de la mañana, llego Luis a su casa al entrar al cuarto sintió que un escalofrío recorrió todo su cuerpo allí en su cama, la que había comprado con el nacimiento de Luisito yacían Elena y los tres niños, los llamo pero no respondieron, entonces tomo a su Luisito entre sus brazos estaba muy frio, Luis por primera vez apreció el amor que sentía por sus hijos y su alma se le desgarro, no podía ser cierto , estaba soñando, grito y grito pero el dolor era tan profundo tan grande que no cabía en su pecho, en una mesita junto a la cama había una nota que decía : “ ahora ni yo ni mis hijos te vamos a estorbar, nunca nos quisiste, yo los traje , yo me los llevo ,yo te libero…” Elena en el jugo que había preparado para ella y sus hijos puso veneno y así murieron los cuatro
A partir de ese día Luis se sumergió en el alcohol, con la esperanza de morir algún día y reencontrarse con sus hijos, nada más lejos de la realidad .Ahora anda de indigente añorando la muerte, pero ella no le llegara tan fácil, el sufrirá por haber despreciado lo que dios y la vida le dieron.
airamsaira