Había
una vez un grupo de niños que habían quedado para jugar un partido de
fútbol por todo lo alto. Habían dedicido que cada uno llevaría un
elemento importante que hubiera en todos los partidos oficiales, y así,
uno trajo el balón, otro el silbato, otro una portería, otro los guantes
del portero, las banderillas del córner, etc... Pero antes de comenzar
el partido, a la hora de elegir los
equipos hubo una pequeña discusión, y decidieron que podría elegir aquel
que hubiera llevado el elemento más importante.
Como tampoco se
ponían de acuerdo en eso, pensaron que lo mejor sería empezar a jugar al
completo, con todos los elementos, e ir eliminando lo que cada uno
había traido para ver si se podía seguir jugando y descubrían qué era
verdaderamente imprescindible. Así que comenzaron a jugar, y primero
eliminaron el silbato, pero quien hacía de árbitro pudo seguir
arbitrando a gritos. Luego dejaron a los porteros sin guantes, pero
paraban igual de bien sin ellos; y tampoco se notó apenas cuando
quitaron los banderines que definían los límites del campo, ni cuando
cambiaron las porterías por dos papeleras...; y así siquieron, hasta que
finalmente cambiaron también el balón por una lata, y pudieron seguir
jugando...
Mientras jugaban, pasó por allí un señor con su hijo, y viéndoles jugar de aquella forma, le dijo al niño:
-"Fíjate, hijo: aprende de ellos, sin tener nada son capaces de seguir
jugando al fútbol, aunque nunca vayan a poder aprender ni mejorar nada
jugando así"
Y los chicos, que lo oyeron, se dieron cuenta de que
por su exceso de orgullo y egoísmo, lo que se presentaba como un partido
increíble, había acabado siendo un partido penoso, con el que apenas se
estaban divirtiendo. Así que en ese momento, decidieron dejar de un
lado sus opiniones egoístas, y enseguida se pusieron de acuerdo para
volver a empezar el partido desde el principio, esta vez con todos sus
elementos. Y verdaderamente, fue un partido alucinante, porque ninguno
midió quién jugaba mejor o peor, sino que entre todos sólo pensaron en
divertirse y ayudarse.