Revista Cine
Eric Rohmer nos dejó no hace mucho pero seguirá eternamente con nosotros gracias a su obra fresca, natural y profunda que invita a pensar en la vida. Con sus cuentos de las cuatro estaciones nos invitó a husmear en la vida de personas comunes y corrientes que se mueven en la cotidianidad mientras se enfrentan a sus propios fantasmas. Así es Gaspard (Melvil Poupaud) un estudiante de música que va de vacaciones a la región de Bretaña para encontrase con una novia escurridiza e independiente que le genera mucha angustia y preguntas. Mientras la espera, conoce a Margot (Amanda Langlet) con quien iniciará una relación auténtica y sincera, que le confronta y le obliga a entenderse a sí mismo. Tendrá tiempo para tener un affaire con una joven más que al final le resulta poco cautivante. El viaje de un joven que busca el amor sin comprenderlo, encuentra en la presencia real de una desconocida muchas respuestas a las dudas tan comunes en los jóvenes que tienen la energía para avanzar a punta de ensayos y errores. Disfrutable de principio a fin.