Revista Cultura y Ocio

Cuentos de verano II - Escuela de verano para escritores (Julio)

Publicado el 29 julio 2016 por Alicia Cardete Vilaplana @read_infinity
escuela de verano para escritores noveles, verano 2016
¡Feliz viernes! Hoy, como ya os comenté, toca subir uno de los cuentos de mis alumnos de la escuela de verano. El cuento de hoy es de Alejandro Ponce. Alex ganó el segundo reto con su relato. En esta ocasión, había que iniciar una pequeña historia basada en un pequeño diálogo romántico. Lo que más me gustó del texto de Alex fue su originalidad y su frescura. ¡Espero que lo disfrutéis tanto como lo disfruté yo!
ALEJANDRO P. - GANADOR DEL RETO 2
Soy Alejandro Ponce, tengo veintitrés años y me encanta escribir. En general, lo suelo hacer en privado y para mí (o para pocas personas de confianza), pero gracias al curso de la escuela de verano he comenzado a superar mis miedos, y ahora ya empiezo a atreverme a compartir mis textos en público.

En estos momentos estoy intentando escribir mi primera novela, con la intención de presentarla a un premio de narrativa juvenil. O lo que es lo mismo, estoy intentando solventar los problemas de escribir una historia larga, ya que estoy acostumbrado a escribir relatos cortos.

Por si os interesa comparto opiniones sobre libros, películas y algunas reflexiones en mi blog, La Tauleta de Nit. De vez en cuando (y a partir de ahora con más asiduidad), también comparto relatos que he escrito yo. Así que podéis seguir mi blog si queréis conocerme más.

Gracias a Alicia por ofrecerme esta oportunidad de darme a conocer, y gracias a todos aquellos que leáis el relato.


Cuentos de verano II - Escuela de verano para escritores (Julio)

CUENTO 2
—Mi corazón no está en venta —espeté—. Tal vez seas lo bastante valiente para robarlo, o tal vez no.

Su cara exteriorizó sus esfuerzos por encontrar alguna forma de salir del paso, estar a la altura de aquel reto que le proponía. Yo me mantuve estoica tras el mostrador de la tienda de materiales del hogar en la que trabajaba. De repente, como por un impulso, dejó sus bolsas junto a la caja y volvió a adentrarse por los pasillos de la tienda.

—Y además quiero invitarte a cenar —se había atrevido a decir unos segundos antes mientras me entregaba los productos que iba a comprar.
Claro que me interesaba la propuesta; llevaba viniendo a comprar cada día durante las últimas semana y en ocasiones dos veces al día. Al final tuve que fijarme en él. Pero ahora que se lanzaba a hablar conmigo y proponerme una cita no podía darle un sí rápido y rotundo. Tenía que demostrarme que lo merecía, que estaba dispuesto a hacer algo más que venir cada día a verme fingiendo que tenía que comprar.
—¿Me atiende? —La voz molesta de una señora me sacó de mis divagaciones y volví a mi trabajo. Mis manos iban pasando los productos por el lector de código de barras pero mis ojos seguían buscando a aquel chico por la tienda. Cuando acabé de atender a la señora y le di la bolsa sin mirarla, se despidió con la voz todavía más irritada—. Adiós, adiós.
Me apoyé sobre el tablero del mostrador para intentar ver a través del pasillo. Cuando estaba a punto de elevar los pies por encima de la altura de la cabeza, el chico hizo acto de presencia. Justo a tiempo para ver cómo volvía a mi posición normal tan rápido como pude y disimuladamente me colocaba correctamente la camiseta. 
Dejó unos cuántos artículos delante de mí y fue ordenándolos mientras pronunciaba sus nombres y describía para qué los quería.
—Una velas, para ambientar el comedor. Incienso, para aromatizar la atmósfera. Un CD de música chill out para poner de fondo. Y por último un rompecabezas. 
—¿Un rompecabezas?
—Para hacer un trato —continuó—. Cenamos, y si después de cenar consigo resolver el rompecabezas, volvemos a vernos. Así cada vez hasta que algún día consiga robar tu corazón

Solté una breve carcajada y alargué la mano, que él tomó con firmeza y sacudió.

—Pues trato hecho —dije divertida y con ganas de ver hasta dónde nos llevaba aquel interesante juego. Por lo menos, había sido lo suficientemente valiente como para robar mi atención.

¡Esto ha sido todo por hoy! ¿Qué os ha parecido el texto de Alex? ¡Espero que os haya encantado! Por supusto, no os olvidéis de visitar su blog (que por cierto, diseñé yo :P ajaj). Es un chico genial y seguro que le dais una alegría con vuestra visita.
Y recordad que quizás hago una segunda edición del cursillo en Agosto. Si a alguno le interesa, solo tiene que rellenar este formulario para que le avise si lo vuelvo a organizar :)
Alicia

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