Cuervos rojos.
Oscuridad total en mi mente,
cuervos asesinando mis ideas,
desgarrándolas fuertemente,
acabando con cada una de ellas.
Se desangran poco a poco,
puedo escuchar aún sus quejas,
dicen que se mueren,
me imploran defenderlas.
Observo en el silencio,
escondido entre las sombras,
dejando que cada cuervo,
mate lentamente un pensamiento.
Por cada pensamiento muerto,
hay un nuevo cuervo rojo,
que al instante devora a uno negro,
causando así, aún más alboroto.
Cuervos rojos dominan mi mente,
son cazadores de asesinos anteriores,
el resultado de un nuevo nacimiento,
parte del cambio constante del hombre.
Cuando esos cuervos dejen de ser útiles,
serán la comida de pensamientos mejores,
que al poco tiempo serán asesinados,
por nuevos cuervos superiores.
Es el ciclo constante de la mente,
las ideas nuevas se comen a las viejas,
se fusionan y crean algunas mucho mejores,
dejando atrás, a los cuervos negros perdedores.