Cuestión de Oficio | Sobre escribir novelas, según Miguel Vitagliano

Miguel Vitagliano fue el invitado de julio del Ciclo Ficciones en el Centro Cultural de la Cooperación. Su obra está básicamente compuestas por novelas, y sobre esa cuestión se enfocó la charla. Comparto algunos de esos comentarios sobre el oficio literario que podrían interesar a cualquier escritor que empieza.
El jueves 28 de julio tuve el gusto de participar en un nuevo encuentro del Ciclo Ficciones. Esta vez la encargada de la entrevista fue la escritora Fernanda García Curten, con quien comparto la coordinación de estas charlas mensuales en el Centro Cultural de la Cooperación. El invitado fue Miguel Vitagliano, narrador, crítico y profesor universitario argentino, quien además de hablar sobre su obra, leyó un breve ensayo sobre el origen y también la construcción de una de sus novelas: El otro yo.
La obra de Vitagliano abarca ensayo y novela pero es la novela en donde se siente más cómodo, según contó durante la charla. Mientras conversaban con Fernanda García Curten surgieron algunos detalles que fui anotando para compartir en #LaAquateca, quizás como flashes literarios.

Sobre escribir una novela:

Me interesa internarme en un estado donde la escritura sea un pasaporte.
El trabajo de escribir una novela no es saber todo desde el principio todo. Mucho va transformándose a medida que se escribe.
Yo me dejo guiar por mi mal gusto a la hora de sentarme a escribir. Cada vez que lo hago me surgen los mismos miedos, las mismas preguntas. No tengo una visión clara de lo que estoy escribiendo y me gusta ese descontrol.
Cada novela está escrita dependiendo de quien la narra.
La novela es una forma artística. Tiene que ver con las manchas, con un juego de manchas.

Un momento maravilloso a la hora de escribir una novela: 

El momento de la invención.

Sobre sus personajes:

Hay una música que bailan los personajes y a mí me gusta verlos bailar.

Sobre la corrección:

Con el tiempo he descubierto, y me encanta, que escribo las novelas en español y las corrijo en hebreo y yo de hebreo no sé nada. El proceso de corrección, que es en ese hebreo que no conozco, se vuelve algo sagrado, es una lectura doble.

Sobre sus libros:

Me alegro cuando veo alguno de mis libros en las manos de otro.

Un momento de plenitud en la escritura:

La primera vez que la literatura no entró en guerra (con mi vida).

Recomendación para el escritor que empieza: 

Que no envejezca. Un escritor envejece cuando cree en lo que otros dicen y no tiene nada para decir. Escribir es querer decir otra cosa. Por eso recomiendo a un escritor que empieza le recomiendo que escriba, que siga adelante, tratando de encontrar el goce en escribir.

También te dejo un video con un resumen de lo que fue el encuentro:

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