Cuestión de sangre es la nueva propuesta del director Tom McCarthy conocido especialmente por haber dirigido la competente historia de periodismo y ganadora del Oscar a la mejor película, Spotlight. Dentro de su filmografía encontramos todo tipo de largometrajes, unos mejores como puede ser la mencionada anteriormente, The Visitor (2007) o Vías Cruzadas (2003) y otros más olvidables como su anterior título llamado Desastre y Total: Agencia de detectives nº1. La producción que nos ocupa pudo verse en el reciente anodino festival de Cannes celebrado en julio. 
La cinta cuenta la historia de Bill Baker, un americano oriundo de Oklahoma que se dedica a trabajos en construcciones o de perforación petrolífera cuya vida cambia en el momento en el que su hija es acusada de asesinato y apresada mientras estudia en Marsella. El relato se sitúa varios años después de su ingreso en prisión y muestra cómo Bill intenta por todos los medios demostrar la inocencia de su hija, al mismo tiempo que se relaciona con una familia francesa en Marsella.
Matt Damon es Bill y es el protagonista absoluto de la película. Sin él, seguramente, estaríamos ante una propuesta mucho menor. El drama inunda la pantalla y hace que el espectador se identifique con el protagonista porque uno de los elementos más conseguidos es el estudio de personaje de Bill Baker. Acotando su descripción, el personaje aparenta ser el modelo de persona americana por antonomasia: gorra en la cabeza, camisa de cuadros, amante del country, dueño de varias armas, impasible, duro y que se toma la justicia por su mano. Sin embargo, al igual que en la realidad, no todo es blanco o negro porque siempre hay una gama intermedia de colores. En este caso Bill quiere aparentar ser tal cosa, pero en realidad estamos delante de un hombre atormentado, que ha sufrido y sufre y que busca la redención y el perdón ante todo. El actor realiza una interpretación contenida y a la vez magistral.Otro punto a su favor es que el metraje no se hace largo a pesar de su duración (140 minutos). La historia te mantiene en vilo en todo momento y estás esperando ver qué sucede a continuación. Tanto la música como el montaje incrementan la tensión del relato para captar la atención.
Podemos decir que la dirección es muy correcta. La puesta en escena o el uso de ciertos planos no destaca por su belleza ornamental. Estamos ante una historia que no necesita florituras, por lo que la manera en la que está rodada resulta muy natural y verosímil. No necesita tampoco de imágenes bellas para que el relato funcione.Sin embargo, existen ciertos elementos en los que la película flaquea. El primero de ellos es el personaje de la hija y todo lo que rodea su situación. A nivel argumental resulta poco creíble, además de que el director engaña al espectador respecto con su inocencia (no voy a decir nada para no destripar la trama). Solo que ciertas réplicas de la hija y diálogos son artificiales y sirven para avanzar la trama y al mismo tiempo para empatizar con Bill. Son trucos poco trabajados y muy manidos en la mayoría de géneros. Otro punto negativo es que la película no llega a sorprender, todo transcurre como debería de transcurrir, sin sorpresas (aunque bien narrado). Por último, el final demanda una mayor intensidad dramática pues el espectador necesita satisfacer las expectativas generadas por la película.
Estamos ante un film de corte clásico, entretenido, bien interpretado, con una dirección correcta y con elementos dramáticos que pueden llegar a emocionar al que la ve. Pero, peca de ser demasiado conservadora y al final la trama avanza de forma predecible hacia un final que demandaba más sorpresa.
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- ##check## Lo bueno
- Matt Damon en uno de sus mejores papeles: contenido y emotivo.
Es entretenida.
El estudio de personaje de Bill. Desmitifica al héroe americano para dotarle de un humanismo necesario. - ##times## Lo malo
- Predecible y con final poco sorprendente.
Poco desarrollo de los personajes secundarios.
Carece de originalidad. No es una historia que no hayamos visto nunca en los cines.
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- Ambientación 7.0
- Está muy conseguida. Toda la ciudad de Marsella, hace que te sientas un extranjero como el protagonista. Hay una escena en un campo de fútbol que parece completamente real.
- Desarrollo de Personajes 6.0
- El personaje principal interpretado por Matt Damon tiene muchas capas. Sin embargo, la película flojea al definir a los secundarios, se convierten en meros adornos para que la trama avance.
- Argumento / Guión 6.0
- Un argumento que te mantiene en vilo, pero que no es innovador, ni original. Está bien narrado y lo sigues con interés. Es una historia repetida en la historia del cine.
- Entretenimiento 8.0
- Entretenida, tensa y bien interpretada. Todo resulta ameno y su duración se hace corta. Siempre empatizamos con los personajes protagonistas que son más antihéroes que héroes.
- Montaje / Innovación técnica 6.0
- El montaje está bien realizado, pero no innova, pretende contar la historia de la forma más clara posible y sin aburrir. Lo consigue. La fotografía no destaca, tiene un punto al realismo de Paul Greengrass.
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- Puntuación Total 7 / 10
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