Revista Salud y Bienestar
Merece la pena consideralo: ¿cómo te alimentas de información?
Nuestros mayores usaban la radio, la tele y la prensa. Hoy la mayoría consume contenidos digitales a mansalva. Mensajes de Whatsapp, redes sociales, correos electrónicos... inundan nuestros teléfonos y ordenadores aportando una ingente cantidad de ruido.
Al igual que aquellos que no paran de picotear acaban padeciendo obesidad los que lo hacen con la información digital terminan aislados, sobrecargados, distraídos y aturdidos. La obesidad digital nos llena de ingentes cantidades de grasa informativa de poco valor y reduce la fibra magra cerebral que es la que genera creatividad, contacto humano y verdadero disfrute.
Merece la pena reflexionar cómo nos relacionamos con lo digital: con nuestros aparatos, con los programas o aplicaciones que utilicemos y con las redes digitales en las que decidamos estar.
Es importante aprender a comer bien. También lo es aprender a relacionarnos correctamente con el mundo digital, tanto para nosotros mismos como para aquellos que nos rodean. Educar para tener una saludable dieta digital es básico para una infancia que además de comer mal y moverse poco consume cantidades ingentes de contenidos de Internet.
Para los que quieran profundizar el tema Victor Sampedro lleva años dibulgándolo, comparto una entrevista suya en la contra de la Vanguardia y su libro.