Como indica Francisco Sáez en este artículo, tu nivel de energía es uno de los factores que más influyen en tu productividad personal.
Es algo que todos hemos experimentado cuando hemos pasado una mala noche. ¿Verdad que si has dormido poco cuesta mucho ser productivo?
En la primera parte del artículo, puedes leer cómo el método Getting Things Done usa los niveles de energía:
La idea es simple. Si eres capaz de tener un inventario de cosas que requieren poco esfuerzo mental o creatividad para realizarse, tendrás la opción de escogerlas cuando estés en uno de esos momentos de bajo nivel de energía. De esta forma, podrás ser productivo incluso cuando no estás en tu mejor momento.
Esto es, básicamente, una receta para quemar tu energía lo más eficaz posible. Es la manera más eficiente de llegar a una situación en que te has quedado sin ganas de hacer nada más.
Si realmente quieres ser súper efectivo, lo que te interesa no es quemar toda tu energía, sino buscar maneras de tener más tiempo con un alto nivel de energía.
Cuando estás baja de energía, no intentas apretar hasta gastar la última gota de energía. Es mejor dejar de trabajar, tomar una pausa y hacer alguna actividad para recuperar tu nivel de energía.
En la segunda parte del artículo de Francisco puedes encontrar cinco consejos básicos para mantener tu energía alta la mayor parte del tiempo.
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