El TPV (venosa profunda Thrombosis) es la formación de un coágulo de sangre y una complicación que se puede producir y de la que se debe prevenir en el embarazo.
Investigadores de Canadá han indicado a los médicos que hay que tener cuidado de ocurrencia de TPV en el embarazo, sobre todo la probabilidad de ocurrencia en la pierna izquierda que se puede producir en mujeres embarazadas.
Por eso, se sugiere a los médicos que se estudie el área de la pierna para detectar posible trombosis venosa, esto en caso de mujeres embarazadas a las que se les presenta síntomas como cambios de color de la pierna como enrojecimiento. Por otra parte, se puede notar una pierna afectada más caliente que la otra.
Las venas llevan la sangre pobre en el oxígeno desde el cuerpo a corazón y pulmones, y las venas profundas conducen la sangre directamente al corazón por la vena cava. La trombosis vena profunda crea un coágulo de sangre llamado trombo en una de las venas profundas, generalmente en pierna aunque puede suceder en otras zonas, produciendo lo que podría ser un grave problema para la salud del que hay que cuidarse especialmente en el embarazo, ya que además es uno de los factores de riesgo que pueden propiciar el TPV. La tasa de mortalidad por esta enfermedad es del 1%, una enfermedad que si se descubre a tiempo puede ser tratada correctamente por el médico.
Existe tratamiento farmacológico, de trombolisis o de tromectomía venosa, aunque será el médico el que indique qué se debe hacer en cualquier caso una vez que es diagnosticado. Como la mejor forma de tratar una enfermedad es mediante la prevención o la detección temprana, hay que tener cuidado para detectar TPV a tiempo.