Cuidado de pies

Se acerca la temporada de sandalias, y es ahora, cuando más importancia le damos al estado de nuestros pies. Unos pies que necesitan una máxima hidratación para mantener un buen aspecto, y que muchos de ellos están dañados del más uso del calzado, pues para mantener unos pies cuidados también tenemos que cuidar nuestro calzado. 

Hoy vamos a ver algunos de los tratamientos a seguir para lucir pies este verano. 

Exfoliación 

Lo primero de todo es una buena exfoliación y es que hay que deshacerse de esas pieles muertas molestas que pueden llegar a convertirse en durezas si no le ponemos solución. La exfoliación la podemos llevar a cabo con cremas o con calcetines exfoliantes. 
Cremas exfoliantes como de Body Naur, está indicada para pies ásperos y con callos. Entre sus ingredientes se encuentra la urea y la piedra pómez, potenciando sus efectos y eliminando las rugosidades, asperezas y células muertas de la piel. Su uso es sencillo, sobre la piel limpia y seca frotamos con pequeños movimientos circulares, y posteriormente aclaráramos abundantemente. Se aconseja su uso de dos a tres veces por semana. 

Calcetines efectos peeling, de estos calcetines no aconsejo su uso en verano, más bien cuando aún estamos con el zapato cerrado, y es que el efecto no lo hace el mismo día, sino que la piel muerta vamos perdiéndola durante un periodo de 7 o 10 días, en la que piel se renueva y escupe la antigua. Uno de estos calcetines efectos peeling son los de iroha nature, cuya fórmula concentrada de Ácido Glicólico y otros Alfa Hidroxiácidos (AHAs) que promueven la renovación celular de la piel eliminado la piel seca, alisando la piel áspera y grietas y exfoliando profundamente las callosidades y durezas. 

Naturalmente, las limas son otra de nuestras aliados contra la lucha de las callosidades, sin embargo entre las limas, destacaría las limas eléctricas que gracias a sus rodillos intercambiables logra unos resultados satisfactorios de manera rápida y sin esfuerzo. 

Hidratación 
Una buena crema de pies siempre es importante, y aunque en ocasiones utilizamos cremas que no son específicas, sí que se recomienda el uso de cremas específicas de pies y es que necesitamos una hidratación mucho más intensa y que regenere los tejidos. 
En el mercado vamos a encontrar muchas cremas de pies, sin embargo para elegir la mejor crema de pies debemos de fijarnos en sus ingredientes. Normalmente los ingredientes estrellas en una buena crema de pies son: la urea, la manteca de karite y el aceite de jojoba. Sin embargo muchas son las que añaden algún otro hidratante como cera o parafina. Vamos a ver esos ingredientes estrellas que siempre buscamos en una crema de pies: 
Urea: otro de los ingredientes que más se utilizan en la actualidad. Tiene propiedades hidratantes y curativas. Además, es muy eficaz para tratar las erupciones y los hongos. 
Aceite de Jojoba: se trata de un humectante natural que aporta una hidratación profunda y ayuda a equilibrar el aceite de la piel. 
Manteca de Karité: con propiedades antioxidantes, curativas, hidratantes y antienvejecimiento. 
Otro aspecto a tener en cuenta es si son eficaces como agentes bacterianos, y es que no todos incorporan agentes bacterianos para evitar problemas como los hongos. Es por eso que es muy importante conocer esto, y si no lo incorporan podemos añadir unas gotas de árbol de té o de otro aceite esencial antibacteriano a nuestra crema y así suplimos esa carencia. 

Entre las cremas de pies que tienen agentes bacterianos encontramos la crema de pies de Alma Secret o la crema de pies de Eudermin. 

Para una hidratación mayor, nada mejor que los calcetines mascarillas para pies. Unos calcetines que hidratan los pies, dejando un mayor aspecto, en tan solo 10-15 minutos. Los calcetines son muy fáciles y cómodos de usar, basta aplicarnos el calcetín y dejarlos esperar durante el tiempo que sea necesario. Entre los calcetines, destacaría los de Iroha Nature, de los que encontramos una gran variedad: reparadores, relajantes o nutritiva. 
Y una vez puesto apunto nuestros pies, solo le falta un poco de color y a presumir de sandalias.