CUIDADOS DIARIOS PARA DESACELERAR EL ENVEJECIMIENTO.
Una buena calidad de piel no solo está vinculada con factores hereditarios; ahora sabemos que los buenos hábitos y los cuidados adecuados hacen una diferencia sustancial.
En Cosmetología hay un principio que me gusta repetir porque siempre se cumple: “Hasta los treinta tienes la piel que puedes luego de los treinta, la que quieres”.
Desarrollar hábitos saludables siempre te van a favorecer en todos los campos de la vida; ¡Vale el esfuerzo crearlos!
Pasos fundamentales para que mantengas bella y saludable la piel del rostro.
¡No hay excusas! Son 5 minutos al levantarte y 5 minutos antes de acostarte. Te propongo que hagas esta rutina diariamente y vas a ver los resultados.
Tu piel se verá en poso tiempo radiante, limpia, con los poros cerrados, luminosa, aclarada; será admiración y; eso sólo es el principio.
Si eres perseverante con la rutina diaria, vas a ver cuántos mejor, cuanto más joven va a lucir tu piel y, si convirtieras a esa rutina diaria en un buen hábito, te aseguro que le estarías cambiando el destino al aspecto de tu piel.
Primero tendrías que buscar asesoramiento para adquirir los productos adecuados para tu piel (esto es importante); no es necesario que sean productos caros, pero sí que sean de buena calidad.
El Kit básico se compone de cinco productos: limpiador; loción facial; hidratante con protección solar; un producto nutritivo Y máscara facial.
La forma de utilizarlos es la siguiente:
Por la mañana(Tres pasos)
-Utilizar un limpiador; dejar actuar de dos a tres minutos y retirar con esponja y agua.
-Rociar con una loción tonificante o hidratante.
-Colocar una emulsión hidratante con protección solar.
Por la noche
Se repite el procedimiento pero en el tercer paso colocas el producto nutritivo.
Dos veces por semana
Colocar una máscara facial nutritiva, hidratante, reguladora de la gratitud (adecuada a tu piel)
Estos sencillos pasos hechos todos los días, son el pasaporte para tener una piel admirable.
Diferencia entre productos de cuidado diario y medicamentos
Comúnmente se confunden productos de uso medicinal con aquellos que son para el cuidado y embellecimiento de la piel.
Los productos para el embellecimiento de la piel tienen en su formulación características propias que hacen que puedan usarse a diario.
A diferencia de los productos que podría indicar un dermatólogo (medicamentos) por ejemplo, que tendrán formulaciones terapéuticas que sirven para solucionar los problemas de salud que tu piel pudiera tener.
La elección de los productos adecuados para cada tipo de piel
Lo ideal es que puedas pedir orientación a una Cosmetóloga o Cosmiatra para que te diga qué productos son los mejores para tu piel, de lo contrario, asegúrate de leer las etiquetas de los productos, ya que pueden guiarte al momento de comprar.
A continuación voy a describir los distintos tipos de pieles para que veas cuál puede ser la tuya:
Piel grasa
Es un tipo de piel que se presenta un tanto untuosa (por la gratitud que despide), brillosa, con los poros dilatados (ostium foliculares), engrosada; muchas veces se pueden ver escamas, sobre todo a los lados de la nariz.
Es una piel que pudo haber tenido granos, puntos negros, blancos y/o impurezas en general.
Piel seca
Al contrario de la anterior, se presenta con los poros cerrados, son pieles finitas, con mucha facilidad para resquebrajarse, tiran, por lo general no presentan puntos negros ni granos.
En muchos casos ante los cambios climáticos se presenta áspera al tacto.
Piel sensible
Se trata de una piel que se adapta poco a los cambios, por lo general reacciona con irritación, enrojecimiento, asperezas, con picazón; habitualmente se pueden ver los capilares dilatados.
Estas pieles reaccionan fácilmente a los cambios climáticos. Es recomendable utilizar productos que sean para pieles sensibles o hipoalergénicos.
Piel normal
La piel normal o eudérmica es aquella que tiene un balance entre las glándulas sebácea y la sudoral; rara vez tuvo granos o puntos negros, los poros son muy pequeños, presenta una lisura, una lozanía y firmeza ideales. Se asocia con la piel de los bebés.
Piel acnéicas
En este tipo de piel abunda la grasa, además presenta abundantes lesiones primarias como: Puntos negros, blancos, pápulas, pústulas ect.; probablemente presente también lesiones secundarias como ser: Máculas hipo-pigmentadas, máculas hiperpigmentadas, cicatrices hipertróficas e hipotróficas entre otras.
Te expuse los tipos puros de piel, sin embargo, sería bueno considerar combinaciones entre los tipos, por ejemplo, un tipo muy probable sería: que sientas la piel tirante y, al mismo tiempo tienes grasa y puntos negros.
Por eso es importante primero observar el tipo de piel y luego comprar el producto adecuado.