Cuidados imprescindibles para un pelo sano y bonito

Para hablar de los cuidados necesarios para mantener el cabello en estado óptimo, antes debemos conocer los problemas más típicos que sufre el cabello. Pocas veces nos paramos a pensar de qué está hecho el pelo, pues bien, es sencillo. Simplificando, el pelo se divide en dos partes: la raíz, la cual está formada por células vivas, y el tronco del pelo, formado por proteínas muertas (queratina).
Hablando ya del cuidado, debemos prestar especial atención al peinado diario, la principal causa por la que se daña el cabello. Peinar el cabello de manera muy agresiva o incidiendo en la raíz puede dañar el cabello.Siempre es recomendable hacerse el cepillado con el pelo húmedo, no mojado, así evitaremos que se encrespe por la electricidad estática y no lo dañaremos tanto al estar más manejable.
Para terminar, lo indicado es echar unas gotas de aceite de argán, ya que fijará el peinado, evitará el encrespamiento y tu pelo se mantendrá saludable. Además si le añadimos algún complemento como inneov densilogy, conseguiremos un extra de volumen, fuerza y densidad.
Para el pelo teñido, los cuidados son un poco más específicos, para empezar el tipo de coloración es básico.
El tinte temporal no penetra en la cutícula con lo cual los daños para el pelo son mínimos. En cambio el tinte semi-permanente y permanente son aquellos que pueden dañar la fibra capilar tanto en la cutícula como en el cortex, con lo cual es esencial adquirir productos que protejan el pelo desde la raíz. Puedes encontrar una gran variedad de productos especializados en la farmacia online, Pharmacius.
Para nutrir el cabello, desde el interior hacia fuera, más que productos externos, lo que más efectivo es llevar una nutrición adecuada rica en nutrientes, vitaminas y minerales. Una alimentación adecuada hace filigranas en el cabello, puedes tomar un extra de vitaminas si lo ves oportuno, aunque lo ideal es que consultes a tu médico de cabecera.
Para aquellas que abusais de la plancha y el secador, es esencial minimizar los daños en la cutícula.Para ello es obligado planchar el pelo completamente seco, ya que la plancha alcanza normalmente entre 150ºC y 200ºC y el agua hierve a unos 90ºC aproximadamente, con lo cual el agua hervirá en nuestro pelo, un proceso que dañará gravemente el pelo.