Plátanos, huevos, vinagre de manzana, aceite de oliva o miel son productos que todos tenemos habitualmente en casa, sin saber quizás que también son grandes nutrientes e hidratantes para nuestro cabello, evitando su opacidad, rotura, sequedad u otros daños.
Mantener el pelo nutrido e hidratado es básico para evitar que pierda brillo o se rompa, los rizos parecen más elásticos y las hebras se notan más brillantes, por no hablar de una innegable mejora en la salud del cuero cabelludo y del pelo en general, mucho más fuerte.
Mezclas de ingredientes naturales que podemos hacer en casa
Huevo: Utiliza el huevo entero para acondicionar tu cabello. Si tienes el pelo seco o quebradizo, utiliza las claras de huevo para hidratarlo. Utiliza media taza de cualquier mezcla de huevo (clara o huevo entero) y aplícala sobre el cabello limpio y húmedo. Déjalo durante 20 minutos y aclara con agua fría.
Vinagre de manzana: Para conseguir una melena con más movimiento, aplica una mezcla de agua tibia y vinagre de manzana después del champú. Luego, acláralo bien después de cinco minutos para eliminar el olor a vinagre.
Miel y aceite de oliva: Haz una mezcla de media taza de miel, una o dos cucharadas de aceite de oliva y otras una o dos cucharadas de yema de huevo, aplicando en medios y puntas durante 20 minutos. Después aclara con agua tibia. Este tratamiento ayudará a reponer los enlaces de proteínas de queratina dañados por el sol.
Como veis no hay excusa para no cuidar tu cabello de la forma más natural.
Desde Dalire, recomiendan el plátano para el pelo seco. Sus vitaminas y minerales, sobre todo zinc y potasio, son nutrientes de primer nivel para un cabello más hidratado: “Una mascarilla capilar con plátano, aceite de oliva y miel es un auténtico elixir para nuestro pelo, capaz de reparar los folículos e incluso favorecer el crecimiento”.
Contra el encrespamiento, por la suavidad que deja y sus propiedades hidratantes y antisépticas, la miel es otro de los ingredientes naturales que podemos usar para cuidar nuestro pelo: “La miel es humectante y muy nutritiva aplicada al cabello, mejorando su aspecto y textura”.
El jengibre, el romero o las semillas de chía y lino son utilizadas por la firma cosmética Di Oleo para elaborar sus champús sólidos: “El jengibre combate la picazón del cuero cabelludo y ayuda contra la caída del pelo, además de evitat la caspa. El romero que tenemos en la cocina es ideal para el cabello graso, ya que el sebo excesivo. Las semillas de chía y lino las podemos utilizar en una mascarilla capilar, limpian suavemente el cabello y también lo hidratan y nutren, sobre todo si se tienen rizos o el cabello muy grueso”.