Cuidar en invierno para llegar estupenda a la primavera

Hola chic@s, cada estación tiene sus efectos en nuestra piel y si no tenemos en cuenta esos cambios podemos encontrarnos con problemas en la piel. Esos efectos estacionales hacen que nuestra piel reaccione de una forma u otra por lo que los productos y rutinas usadas en primavera y verano no van a ser efectivos en otoño e invierno.
Al llegar el otoño, en general tenemos una piel bronceada, iluminada y con ese aspecto saludable que gusta tanto, ya que el bronceado ayuda a homogeneizar el tono el piel y se disimulan mucho más las ojeras o las manchitas que tengamos en la cara. Conforme pasa el otoño, ese tono bronceado desaparece y todas esas irregularidades vuelven a luz, por lo que tendemos a usar el maquillaje a veces en exceso.

El invierno es un gran enemigo de nuestra piel y hay que cuidarla especialmente para mantenerla lo mejor posible. En invierno sin embargo, el uso de más maquillaje, falta de sueño, cambios en la dieta y hábitos, etc pasan factura a nuestra piel. Lo primero que podemos encontrarnos son manchas en la piel consecuencia de la exposición de la piel al sol en primavera y verano, y junto con esas manchas, también podemos notar deshidratación y en algunos casos, arrugas. En tan solo unas semanas parece que a nuestra piel le hubieran caído varios años encima.
En estos meses de frío hay que mantener una muy buena limpieza, sobre todo porque usamos más maquillaje y debemos asegurarnos de que limpiamos bien la piel. Estos meses también trabajaremos en ayudar a la piel a renovarse usando exfoliantes como puede ser el ácido glicólico. Aplicaremos siempre después un buen tónico sin alcohol ni aceites esenciales, pero si con ácido hialurónico y glicerina que nos ayudarán a retener la hidratación. En nuestros tratamiento también es recomendable incluir determinados activos como el retinol o el ácido retinoico y mejor por la noche que por el día, no nos van a molestar las cremas más untuosas que nos pesan y molestan en verano, ahora la piel nos pide cuidados y tratamientos para defenderse de los ataques que sufre en esta época de frío.

Si has tenido cuidado y has protegido tu piel del sol ahora no tendrás problemas de manchas al irse el bronceado, pero si aún así ha aparecido alguna manchita puedes usar productos de tratamiento que contengan, ácido tranexámico, kójico, salicílico, elágico o fítico. También pueden ayudar la vitamina C, la genisteína, la arbutina o el regaliz, todos ellos tienen cierta acción despigmentante. En casos más serios consulta con un profesional que te oriente en la mejor forma de reducir esas manchas. Si en primavera y verano usas protector solar, no lo dejes de usar en otoño e invierno, el sol sigue estando ahí y los rayos UVA y UVB también, por lo que el mejor tratamiento antiedad es usar todos los días un buen fotoprotector.
Durante esta época podemos aprovechar ya que podemos dedicar más tiempo al cuidado de la piel, en aplicarnos mascarillas que nos ayudarán a mejorar el aspecto de nuestra piel y aportarla ese extra de hidratación que en esta época necesita; de esa forma notaremos nuestra piel más jugosa, sana y luminosa.

La alimentación es parte importante para mantener la buena salud de nuestra piel, no solo hay que cuidarla por fuera, sino también por dentro. En las épocas de frío necesitamos proteínas y ácidos grasos y aportar vitaminas como la A, C y D. Otro punto importante es el hidratarnos bien, aunque no sentimos sed igual que en verano, debemos mantener una buena hidratación ya que cuando la piel se seca tiende a perder colágeno y con eso ayudamos a su envejecimiento, intenta beber cada día dos litros de agua para poder mantener la hidratación que nuestra piel necesita.
Esto es todo por hoy, un beso y buen fin de semana.

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