Revista Mundo vegetal
Mini 'Rodeo Kordana'. Fotografía de Kordes Rosen.
Los rosales miniatura, o minis, están a la venta la mayor parte del año, sobre todo en floristerías. Pero es ahora, en primavera, la época ideal para comprarlos y disfrutarlos. Por más que se publicite que sirven para interior, los rosales son plantas de exterior, por tanto, esos minis disfrutarán al aire libre. Si les damos la oportunidad de mostrar todo su potencial, nos darán muchas satisfacciones.
Los cultivan en invernaderos con ambiente controlado, en macetitas de 10.5 cm de diámetro, donde colocan cuatro esquejes, a veces, tres. Es decir, no están injertados. Es un cultivo bastante sofisticado, que permite presentar unas plantitas con aspecto frondoso y flores. En esas condiciones es difícil que sobrevivan, ya que el rosal es una planta con necesidades nutricionales altas y raíces importantes.
Se hace, pues, imprescindible, el separar esos esquejes y plantarlos de forma independiente. Yo lo hago cuanto antes después de la compra, y es lo que recomiendan los expertos en minis. Los motivos para hacerlo así y no esperar, los vais a ver a continuación por vosotros mismos.
Estos son dos minis de Kordes, parte de la familia kordana. La casa alemana se ha convertido en referente a la hora de hibridar estas pequeñas bellezas. Los compré en el mercadillo, 2€ cada uno, y son cuatro esquejes por macetita. Es decir, en tan reducido espacio, ocho esquejes en total (0'50 € cada esqueje). Uno es en color magenta y otro parece un rosa madreperla, aunque no lo veré con claridad hasta que abra alguna flor por completo:
Vamos a necesitar:
-El rosal mini.
-Cuatro macetitas, en este caso, de 1 litro de capacidad. No deben ser demasiado grandes.
-Sustrato ligero. Como siempre digo, cada quien que use el que más le convenza :), no pienso entrar en la 'guerra de sustratos' que siempre se genera entre aficionados. En este caso es uno profesional comprado en la agrotienda, pero os puede servir cualquiera de las marcas habituales en garden center tipo Compo o Flower. Lo único que comento al respecto es que un buen sustrato tiene un precio, se compre donde se compre.
-Tijeras ad hoc.
-Agrosil, que no es imprescindible, pero es un producto que funciona.
-Y, como siempre, los guantes.
Sacamos el mini de su maceta, apretamos el centro del pan de raíces, con firmeza, pero no a lo bruto:
Separamos con delicadeza las raíces de los cuatro esquejes:
Es el momento de observar la diferencia de desarrollo entre esquejes, siempre hay uno o dos que dominan al resto, por eso se hace necesario no esperar para separarlos, porque los más débiles terminan por secarse. Aquí el más grande del grupo:
Y aquí el esqueje más chiquitín:
Llenamos hasta la mitad más o menos las macetas con el sustrato:
Colocamos el esqueje:
Añadimos Agrosil:
Y terminamos de rellenar con sustrato, procurando que el tallito no se descentre:
Cortamos las hojas que están en contacto con el sustrato, para facilitar la aireación:
Y regamos con suavidad:
Ya tenemos listos nuestros esquejes. Reitero la importancia de observar la diferencia de tamaños entre ellos:
Se colocan en una zona de sombra, durante unos días, vigilando el riego. Ojo, los novatos: cuando no se tiene práctica, es mucho más fácil que mueran por exceso de riego, que ahoga las raicillas. Pero tampoco se pueden dejar secar. No tengo la varita mágica de las explicaciones: solo la práctica hará que sepáis encontrar el punto justo.
Personalmente, los dejo tal cual, porque estoy habituada a cuidarlos. Pero, no es mala idea que los novatos recorten parte aérea para favorecer su desarrollo. Supone sacrificar las flores o capullos, pero, a cambio, la fuerza se concentra en formar nuevas raíces y pronto brotarán con mucha fuerza:
Éstos son los esquejes del otro mini. El de la izquierda estaba muy perjudicado por la dominancia del resto, le tuve que recortar bastantes ramitas secas:
Una vez bien enraizados, se pueden plantar en el jardín o en un contenedor. Seguiremos....
"Una rosa es una rosa es una rosa". Gertrude Stein.