Hoy, un año más… sabia, (dicen unos para evitar que aquella arruga de la frente sea más evidente) comparto una pequeña canción que escribió mi padre allá por 1981 y que año tras año sigue siendo mi regalo favorito.
Has cumplido tres años y todavía
no sé de dónde has venido
de qué planeta o qué rosa
de qué vuelta de ola o qué río
de qué metal, de qué roca.
Dime de dónde has venido
de qué noche de amor prodigiosa
de qué encuentro de astros perdidos
de qué sal, de qué ola.
Dime de dónde de dónde has venido
a cumplir con tu palabra
Dime de dónde de dónde has venido
y a dónde vas que yo no vaya
Has cumplido tres años y todavía
no sé de dónde has venido
de qué nube de sol o paloma
de qué vuelta de ola o qué río
de qué sal, de qué concha.
Dime de dónde has venido
de qué lluvia de rayo o qué nido
de qué metal, de qué nota.
Dime de dónde de dónde has venido
a cumplir con tu palabra
Dime de dónde de dónde has venido
y a dónde vas que yo no vaya