Me encantan las tecnologías y probar cosas nuevas y cuando madresfera me envió el e-mail de la promoción sobre los cupets, donde podías probarlos… ¡¡no tardé ni dos minutos en apuntarme!! Y tuve la suerte de ser una de las seleccionadas para probar estos bichejos virtuales.
Mi primera sorpresa fue cuando llegaron a casa. Me los esperaba de mucho más tamaño, pero creo que el tamaño que tienen es ideal. Caben en la palma de cualquier mano, incluso de los nenes de nueve años y te los puedes llevar a jugar al parque sin tener un trasto más que cargar, dado que cabe en cualquier bolsillo. Me ha gustado mucho el tamaño. No veo demasiado útil el enganche, pero en un momento dado se podría aprovechar, así que mejor dejarlo.
No vienen casi instrucciones y es algo que sí eché de menos, porque no tenía nada claro. Entendí que había que descargar la app e instalarla. Tarda, no es algo que puedas hacer en cinco minutos, pero tampoco es insoportable. Te va enseñando los dibujitos y qué puedes hacer con ellos. Una vez instalada, cuando quieres jugar con una de las mascotas, no te deja… tienes que comprarla o introducir un código. Como ya la tenía, pues puse el código de uno de los cupets… ¡¡¡y a jugar!!!
Es muy jugable, perfecta para la edad recomendada. De 9 a 14 años, cuando empiezan a pedirte perritos o mascotas a casa. Y con cómo corren los tiempos hoy en día, al menos una tablet sí que tienen. Como tienes muchísimos entre los que puedes elegir, pues seguro que alguno encajará con el niño. Yo me tiré a por el murciélago y la verdad es que ando enganchada a las mascotitas. GatitaNegra de vez en cuando insiste en recordarme que ella también existe. Debo confesar que yo ampliaría el rango de edad a los más jóvenes, más a partir de los 6 o 7 años. Tiene colores chillones con los que ellos se quedan embobados.
Jugar con ellos es fácil, no me gustan las comparativas, pero tiene una mecánica parecida a Pou. Eso sí, con multitud más de opciones y creo que lo que más me gustó de todo y lo más genial de los Cupets es su Realidad Aumentada.
Es como si interactuaras con ellos en el escenario donde pongas la mascota (el jugete físico). Además puedes hacer fotos con ellos.
Bueno, después de esta impresión personal, voy a seguir el criterio impuesto para esta crítica:
- Facilidad de Uso
Es muy fácil, no tiene complicación ninguna. Todo muy intuitivo, sobre todo para cómo son a esas edades, que nos adelantan en menos de nada. Sí he echado de menos una guía básica, pero es perfectamente jugable sin ella.
- Jugabilidad
Perfecta, me encanta. Tiene tantas opciones que podrías estar durante horas con un sólo cupet divirtiéndote. Si no es en sus cuidados básicos, es en las opciones de realidad aumentada o sus minijuegos. Me sorprendieron mucho por lo fáciles que son y educativos.
- Diversidad de opciones de juego
¡Tienes para aburrir! Si quieres sólo cuidarlos, puedes hacerlo. Tienes para jugar a minijuegos y también para la realidad aumentada, haciendo fotos y demás. Eso sí, eché de menos que las características fueran más específicos a los animales que representan. Ejemplo, el gato siempre va a necesitar más mimos que una rana, pero en el juego esto no se contempla. Tampoco la alimentación. ¿Una rana comiendo filete? Quizás esto podría ser un poco más educativo aprovechando la programación.
- Material del juguete
Perfecto, ni blando ni duro, y nada pesado. Creo que el material está genial. Impermeable… Es que no se me ocurriría otro mejor.
- Diversión
¡Total! Como ya he dicho antes, si sólo quieres cuidarles, te lo pasas bien. Los minijuegos son fáciles, divertidos, educativos y curiosos, me gustaron mucho. La realidad aumentada ha sido también un descubrimiento completo.
Dejo aquí algunas fotos: