¡Hola chic@s!
Hoy lunes tengo que decir que sigo con la misma lectura que en el anterior Currently Reading. La tristeza del samurái de Victor del Árbol, me estaba gustando mucho, pero no sé porque se me ha atascado. Así que he comenzado otra lectura para llevarlo mejor, y espero poder seguir con el pronto. La otra lectura que he comenzado es La estrella de Javi Araguz e Isabel Hierro, que lo he cogido en la biblioteca. No creo que tarde en terminarlo porque me está gustando bastante. Y ahora os dejo con los comienzos de los dos libros. "Existe un tipo de personas que huye del cariño y se refugia en el abandono. María era una de ellas. Tal vez por esa razón se negaba a ver a nadie, incluso ahora, en aquella habitación de hospital, que era como una estación de final de trayecto.
Prefería quedarse mirando los ramos de lilas que le enviaba Greta. Las lilas eran sus flores preferidas. Intentaban sobrevivir en el jarrón de agua con ese gesto heroico que tiene todo lo inútil. Sus frágiles pétalos languidecían día tras día, pero lo hacían con elegancia discreta, con su color tornasolado.
A María le gustaba creer que su agonía era también así: discreta, elegante, silenciosa. Sin embargo, allí estaba su padre sentado en su silla de ruedas a los pies de la cama cual fantasma de piedra, un día tras otro sin decir ni hacer nada, excepto contemplarla, para recordarle que no todo iba a ser tan fácil como morirse. Y luego bastaba que se entreabriera un poco la puerta para ver al policía uniformado que custodiaba la habitación, para comprender que todo lo que había sucedido en los últimos meses -los asesinatos, la huida de César- no se borraría, ni siquiera cuando los médicos desconectasen la máquina que la mantenía aún con vida."
"Como una bestia que engulle su presa, aquella misteriosa niebla devoraba el pueblo lentamente. La noche había llegado sin previo aviso, sin atardecer ni luna, acompañada por un tupido velo que lo envolvía todo en la más confusa oscuridad.
- ¡Mi hijo! ¡Mi hijo ha desaparecido! Por favor, ayudadme a encontrarlo antes de que la Quietud se rompa -suplicaba entre sollozos una mujer, mientras sus vecinos agachaban la cabeza y se desvanecían entre la niebla como fantasmas-. ¡Cobardes! Es mi pequeño. Todos le conocéis -apeló a su compasión.
La madre se dirigió a casa de su mejor amiga mientras se enjugaba las lágrimas.
- ¡Naya, te lo ruego, no me abandones tú también! - le imploró aporrando la puerta."
¿Habéis leído alguno de los dos libros? ¿Os llaman la atención? ¿Qué estáis leyendo?