En el Reino Unido, se valora el curriculum ciego, es decir, basado en la experiencia del candidato y el recorrido formativo y no dando tanto peso a la institución en la que se ha graduado. Se busca creatividad, la motivación y el talento procedente de cualquier parte, independientemente del prestigio de la Universidad donde se haya estudiado. Desde las empresas tecnológicas se están dejando valorar la educación formal recibida para centrarse en el aspecto que señala el impulso autodidacta en el aspirante.
Son las habilidades blandas las que están adquiriendo relevancia en los procesos de selección. Una formación hecha medida de tus intereses que demostrará que eres una persona motivada, proactiva y con una actitud de mejora permanente.