Revista Diario
Este fin de semana he tenido la gran suerte de poder asistir al Curso de Lactancia avanzado que Rosa Sorribas ha impartido en Madrid. Rosa Sorribas es, ....., muchas cosas, creadora del portal Crianza Natural, doula, consultora en lactancia certificada internacionalmente (IBCLC), así como asesora del grupo de lactancia Areola de Castelldefels. Y es que Rosa,..., es mucha Rosa. Es una mujer a la que te pasarías horas, días escuchándola, tiene tanto que aportar. Tiene respuesta para todo, respuestas basadas siempre en evidencias científicas, estudios, ¡es increíble lo que esta mujer estudia, lee, investiga!.
El curso como podéis ver tenía un temario muy amplio, muy ambicioso, el tiempo era insuficiente para poder abarcar detenidamente cada punto. Pero allí nos reunimos unas veinte mujeres, casi todas con conocimientos previos en la materia, sabíamos de lo que nos iba a hablar. Muchas con experiencia personal en lactancia, otras no, todas con una historia interesante que escuchar.
He sacado muchas conclusiones positivas de este fin de semana:
Mujeres implicadas en la crianza y lactancia de un modo admirable, entregado. Ansiosas de ayudar a otras madres, de formarse, de saber más.
Madres que asistieron con sus hijos, con sus bebés. En estos ambientes es normal encontrarse a mujeres que llevan a sus pequeños. ¡Y no pasa nada!, balbuceos de niños, algún grito, un leve llanto, pero nunca molestan, es lo normal. Mujeres que normalizan su maternidad, que no la esconden, bebés que se comparten, ahora te le cojo, ve tranquila al baño, déjame que lo achuche, igual en mis brazos se calma..... qué maravilla! Padres, abuelas fuera para que las madres pudieran atender mejor, apoyo familiar, tribu. La familia apoyando a esa mujer que es madre,..., y muchas cosas más. ¡Fantástico!.
Profesionales sanitarios que asisten a un curso de lactancia para poder mejorar su práctica diaria. Dos enfermeras y una matrona. Era estupendo escucharlas hablar, sus ganas de mejorar las cosas, su implicación personal, sus conocimientos. Mujeres sabias que quieren ayudar a que las cosas se hagan mejor. Una de esas enfermeras trabaja en el hospital donde mi hijo nació, del cual siempre he dicho que médicamente es de los mejores, pero en el trato humano es asqueroso. Así me lo confirmaba ella, pero también me contaba lo mucho que ha cambiado en los últimos años y el esfuerzo tan grande que ella y otros muchos hacen cada día para que la transformación se vaya produciendo. De hecho ella era miembro de un Comité de Lactancia que se había creado. ¡¡Increíble!!.
Todo esto me demuestra que vamos dando pasos hacia adelante, pasos muy positivos e importantes. Humanizar el trato a la madre en los hospitales, mejorar los protocolos de parto, ayudar al inicio de la lactancia materna, hay mucho por hacer, pero pasito a pasito los profesionales sanitarios se van implicando, y eso será lo que nos haga ver la luz.
Allí estábamos, veinte mujeres dispuestas a hacer grandes esfuerzos para ayudar a otras mujeres, para conseguir normalizar la lactancia, la crianza respetuosa, para aprender, para compartir nuestras experiencias.
En mi caso particular he aprendido y mucho. Todas las horas de estudio previas he visto que han merecido la pena, sabía más de lo que pensaba. Esta formación viene a completar algunas lagunas, que no eran pocas. Aún me queda por repasar la documentación facilitada, buscar algunas referencias y seguir investigando cositas. Porque esto nunca se detiene. Pero estoy satisfecha. Ahora queda dar el salto a la práctica, e intentar en vivo ayudar a toda aquella mujer que lo necesite.
Gracias Rosa por un fin de semana estupendo, por todo lo aprendido, espero volver a encontrarme contigo pronto.