Curvas en libertad

Nunca el desnudo fue tan importante
para dejar claro el verdadero mensaje;
de tu cuerpo eres autentica gobernante
por encima del postureo irreal y salvaje.

Las curvas en una figura son belleza

no pueden significar miedo o vergüenza;
porque la hermosura supera con destreza
encaramándose en una trenza.

Los miedos deben dejarse en el contenedor

pues no deben ser compañeros de este viaje;
de seducción, tu cuerpo es proveedor
provocando que el deseo hiciera el equipaje.
No es fácil ser una persona corpulenta
en un mundo donde la delgadez es la reina;
tu dignidad nunca puede estar a la venta
pues tu lindeza en el espejo se peina.
Te buscaron humillar por tener muslos enormes
criticaran tu vestimenta de forma destructiva;
poseedores de corazones enfermos y deformes
que no tienen una visión productiva.
Amplias caderas contonean un paso seductor
ser bella no entiende de kilogramos;
permitiendo al morbo ser un fiel conductor
de los sueños que siempre adoramos.

Rompe tus cadenas y sueña con libertad

la gordura es motivo de seducción;
de la preciosidad tienes la potestad
para complementar a una salvaje atracción.
Dominar tu vergüenza y convertirla en naturalidad
sacar a los demonios que impiden que ilumines;
evitar a los pobladores de la antigua moralidad
que no desean que tus mejores sueños, tú imagines.
Un cuerpo desnudo siempre es hermoso
las cicatrices y arrugas, compañeras de experiencia;
no permites que el miedo se vuelva irrespetuoso
pues la gravedad forma parte de la ciencia.
Ante la locura de dietas milagros y adelgazantes
siempre queda luchar por una correcta alimentación;
te llegarán salvadores y abundantes farsantes
para que te unas a su numerosa congregación.
Tú debes ser tu principal admiradora
convivirás con tu figura de forma indefinida;
no dejes que un alma manipuladora
sea quien en tu cuerpo decida.
Si bajas de peso que sea por tu decisión
priorizando tu salud para evitar enfermedad;
pero nunca dejes de mantener aquella visión
en la que la alegría vence a la soledad.