El Consejero de Empleo de la Junta de Andalucía figura como prejubilado en uno de los EREs que él mismo aprobó. Además, su antigüedad en la empresa coincide con su fecha de nacimiento. Se trata de Antonio Fernández quien ejerció el cargo entre 2004 y 2010. Durante su mandato se acogió al ERE de la empresa bodeguera González Byass. En su vida laboral figura que entró a trabajar el mismo día que nació.
Después, el propio interesado, declara que es un error humano, por supuesto del que no es responsable, la cosa esta de las fechas y tal; aunque tengo la sensación de que las cantidades percibidas a través de las pólizas de seguro garantizadas por Vitalicio, guardaban relación con la antigüedad en la empresa. Que el exconsejero trabajase antes de haber nacido era rizar el rizo, pero hacerlo nada más llegar a este mundo, no podría interpretarse más que como la capacidad de sacrificio y voluntad de servicio que el Sr. Fernández demostró desde tan temprana edad.
Ahora D. Antonio es presidente del consejo regulador de la denominación de origen de Jerez, un cargo político bien remunerado y que es más compatible con la cosa de las regulaciones de empleo que incluyen, en nuestra España cañí, al propio consejero que los rubrica. Nada, qué se le va a hacer, el Sr. Fernández trabajó en la bodega desde el mismo día de su venida a este mundo y ello le supondrá percibir unos cuatrocientos mil euros a lo largo de estos años, que serán compatibles con el resto de retribuciones, tan sobradamente merecidas por la gran capacidad de trabajo y sacrificio de que ha hacho gala desde su nacimiento.