‘Dancers’, Vivir amando. Película completa
agosto 9, 2013 por Silvia.ssu
Cuando hace un tiempo preguntaba en las redes sociales por las películas favoritas de ballet, los balletómanos respondieron con Las Zapatillas rojas (1948) y Center Stage (2000). Pero, desde Argentina, la encantadora Paula Cassano me recordaba Dancers (1987), y después, el link a youtube.
Dancers tiene un reparto espectacular, con Mikhail Baryshnikov, Alessandra Ferri, Julie Kent, Leslie Browne, Lynn Seymour y Victor Barbee, y está dirigida por Herbert Ross, director de éxitos de danza cómo Turning Point (1977) y Footloose (1984). Pero, estoy segura que para muchos lectores, sobre todo los más jóvenes, esta será la primera vez que la vean, porque es bastante difícil de encontrar online, y, hasta donde yo sé, no se ha editado en DVD (está disponible en vhs venta privada y instantvideo en amazon) . Tras el éxito de Turning Point, Dancers volvió once años después a intentar repetir el éxito con Baryshnikov y Browne, o al menos entre el mundo de la danza, como fue el caso de Nijinsky (1980).
Esta es una versión en inglés con subtítulos en español, la calidad de imagen no es muy alta, como es de esperar.
Y a continuación, unos comentarios personales sobre la película, con
SPOILERS
Así que, los que no quieran desvelarse detalles antes de verla pueden dejar de leer tras la foto.
Mikhail Baryshnikov y Leslie Browne-
Hay una parte de la película que sí que es fácil encontrar online, y de hecho, es el segundo vídeo en aparecer cuando se busca Baryshnikov en youtube. En esta escena, Baryshnikov practica a solas y en silencio momentos de las variaciones de Albrecht y la cámara se limita a permanecer a un lado. Que este sea el momento más recordado nos dice algo sobre esta película, no documental, sino dramática.
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La película trata de doblar la historia de Giselle en la escena y en la sala de ensayo, un poco cómo la Carmen (1983) de Carlos Saura, eso sí, sin un ápice de la fuerza dramática. Dancers es una buena oportunidad de ver a tan espectacular reparto en escena (por lo que estoy segura que todos los balletómanos querrán verla) , pero, para una historia dramática, el guión de Sarah Kernochan deja mucho que desear. La trama nos acerca a una joven americana que se une a una compañía italiana, a tiempo para la filmación de su producción de Giselle, por una estrella de la danza, con la que vivirá un brevísimo affaire, en contra de las advertencias de sus compañeras, hasta que se da cuenta de que no significó nada para él. Para mí, la querida Center Stage, a pesar de no ser tampoco un prodigio cinematográfico, lleva de manera más entretenida esa línea.
Baryshnikov interpreta a ‘Tony‘, Anton, un divo de la danza ruso, vividor, mujeriego y ligeramente melancólico. Sí, el mismo papel que interpretaría anteriormente en The Turning Point y White Nights. Julie Kent, con apenas 18 añitos, interpreta a Lissa Strasser, la ingenua recién llegada, que con su pelo claro y grandes ojos vidriosos parece más un cervatillo que el árbol de flores blancas con el que la compara el personaje de Tony.
Victor Barbee, Mikhail Baryshnikov y Alessandra Ferri -Nuestra protagonista y doble de Giselle también tiene un Hilarión, un pretendiente italiano, Paolo (Leandro Amato) con el que mantiene una relación bastante confusa. En la primera escena, Paolo le va a buscar al aeropuerto, confundiéndola con su entusiasmo, puesto que ella no habla ni una palabra de italiano. La siguiente vez que lo veamos, ya son novios y se marcha en su motocicleta con las puntas y el tutú romántico aún puestos. En la próxima escena, le presenta a su abuela, pero a continuación, la siguiente vez que los vemos, ella necesita de la intervención de Tony para quitárselo de encima porque no consigue entenderse con él.
A pesar de la corte de ex y actuales amantes, Nadine/Myrtha (Browne, con su propia historia de rencor respecto al padre de su hija), Francesa/ Giselle (Ferri), y la Condesa (Mariangela Melato), Lisa acepta las invitaciones del artista, con un ávido ”Yo te amaría, si tu quisieras”.
Pero, si las escenas con Lisa y Ton a solas, pudieron ser el comienzo para introducir a los dos personajes (de los que apenas descubrimos nada nuevo durante la primera hora de la película), entrando en el segundo acto de la película (y del ballet), la película se olvida de la historia y nos quedamos viendo la escena. Tratándose de Baryshnikov y Ferri, eso no es mal asunto, pero es bastante curioso teniendo en cuenta todo lo que había pasado en el intermedio entre los actos. Tras el final del primer acto, en sincronía con la escena de la locura, Lisa abandona el teatro llorando, por lo que Paolo le recrimina a Tony su partida, y este abandona el teatro en Milán para ir a buscarla, a una Iglesia costera donde tuvieron una cita. Allí encuentran la chaqueta de Lisa (que Tony le había prestado de la marquesa) en el mar, pero el ayudante convence a Tony de abandonar la búsqueda y llamar a la policía. Parece dramático, ¿no?, pues en el siguiente corte volvemos al escenario, dónde Tony baila el segundo acto con facilidad, y nadie hace ninguna mención a que la estrella principal halla salido corriendo del teatro durante el intermedio (por no decir que Milán no tiene ninguna costa). Al final del ballet, Lisa vuelve al teatro, y descubrimos que se ha hecho un tatuaje de las flores blancas… y todo el mundo perdona a todos y comen pérdices.
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La verdad es que no pude contener la carcajada cuando vi que el tatuaje lo explicaba ‘todo’. Puedo comprender por que esta película ha caído en el olvido, pues, por muy interesante que sean los bailarines en ella, los personajes que están obligados a representar no tienen ningún tipo de interés, y el público no llega a conectar con ellos, puesto que no se ofrece ningún dato sobre ellos. ¿Por qué Tony está cansado de bailar y necesita, como dice su ex ‘acostarse con dos chicas para sentirse mejor por la mañana’?, ¿Por qué Nadine discute y luego perdona al padre de su hija?, ¿Por qué Francesa tiene una relación con Tony a pesar de no sentir nada por él?. Pero, mejor no hacerse muchas preguntas y pasar a las escenas de danza, que es lo mejor, sin duda de esta película.