¡Danos paciencia, Señor...!

No voy a escribir esta vez sobre ningún sinvergüenza en concreto, sino sobre todos ellos en su conjunto. La verdad es que tengo muchos nombres en mente, demasiados tal vez. Algunos artículos ya medio acabados no ven la luz al no llegar a convencerme. No encuentro las palabras adecuadas para transmitir el profundo asco y repugnancia que me producen algunos de estos seres, por llamarles de algún modo. Es evidente que los jetas, los sinvergüenzas y los corruptos son multitud en este país llamado España. La cantera es inagotable. ¡Danos paciencia, Señor...!
Hablaré hoy, por tanto, sobre algo que me ha llamado la atención durante mucho tiempo: El sentido del humor y fina ironía que demostramos los españoles frente a esta nube de ladrones, estafadores y vendedores de humo. Si el santo Job levantara la cabeza, no sería capaz de aguantar durante tanto tiempo los desmanes de nuestros dirigentes sin emprenderla a porrazos contra estos parásitos que nos chupan hasta la sangre cada día.
Se pudo escuchar a nuestro presidente, en una de las habituales meteduras de pata de los políticos cuando creen que nadie les oye, que temía una revuelta en las calles como la acontecida en Grecia. Menos mal que ahora se está jugando la Eurocopa de fútbol y, mientras España siga ganando, no va a ocurrir nada. Es como un narcótico que nos hipnotiza, o mejor dicho, nos idiotiza. Y también está el tenis, la F1 y los juegos olímpicos para ir tirando hasta el otoño. Luego ya se inventarán alguna otra chorrada (tipo gripe A o similar) para distraer la atención... Inventiva y recursos (aunque burdos) no les faltan.
No voy a extenderme mucho más. Simplemente voy a mostrar algunas viñetas, recogidas a través de correos electrónicos o del mismo Facebook que muestran el sentir general de los sufridos ciudadanos.
Desconozco a quién pertenecen las imágenes. Si el autor de alguna de ellas la ve aquí y le molesta, no tengo ningún inconveniente en retirarla. Creo, no obstante, que el objetivo al crear las mismas es precisamente el concienciar a la sociedad procurando su máxima divulgación.

La fantástica revista "El Jueves" es una de las que más "caña" viene dando a los responsables de la actual situación social y a los sinvergüenzas de este país.
Y vamos a ver algunas críticas a la banca...


Arriba podemos apreciar la "galería de los horrores". Con el cemento armado que hay en las jetas de estos chorizos se podría construir un "bunker" anti nuclear de ocho plantas. Son las indemnizaciones (les premian por sus fatídicas actuaciones, supongo) que han recibido algunos banqueros al abandonar sus puestos. ¡Es una auténtica vergüenza! Y luego dicen que no tienen liquidez. No me extraña. Hablan de millones de euros como nosotros podemos hablar de céntimos. Y necesitan que les "rescaten"... Los que necesitamos ser rescatados somos nosotros, pero de estos hijos de la grandísima puta que manejan nuestras finanzas.
A la izquierda y abajo un poco de crítica a la situación social...
Y, como no, las críticas a nuestros "adorables" políticos, los causantes de toda esta situación...


Debemos tener en cuenta, además, que todas estas sanguijuelas están duplicadas, triplicadas o cuadruplicadas... Aparte de la monarquía desfasada, el gobierno central, el parlamento, el congreso con sus innumerables comisiones y los ministerios, existen los gobiernos autonómicos (con sus correspondientes parlamentos), las delegaciones de gobierno y ministeriales en cada autonomía, las diputaciones forales, las juntas generales, los ayuntamientos... Esto es insostenible. Poca ubre para alimentar a tanto becerro. Y no nos olvidemos del parlamento europeo. ¿Para qué sirve? Yo de mayor quiero ser "euroIMPUTADO". Sueldos de infarto, viajes a todo lujo, dietas diarias con las que podría subsistir una familia numerosa durante más de una semana, etc.
Y en cuanto a las fuerzas de seguridad, por ejemplo, coexisten en ciertos lugares la Guardia Civil, policía nacional, policía autonómica, policía foral y policía local. Como cantaba Sabina... "mucha, mucha policía..." El problema es que cuando te ocurre algo y tienes que llamarles (no por gusto, obviamente) no sabes a quién acudir. Todos se van pasando la pelota de sus "competencias" de uno a otro.

Este último es mi favorito. Lo que daríamos por tener sólo 40 "chorizos"... o incluso 400, 4.000, 40.000 o 400.000... Porque ¿cuántos sinvergüenzas "públicos" hay en España? Con que se consiguiera mandar a la mierda a la mitad de ellos, creo que todos nos daríamos por satisfechos. Pero existe un problema: ¡Son una casta intocable! Ellos mismos redactan las leyes que les protegen, se asignan sus propios sueldos y se encubren unos a otros.
Y hasta aquí este artículo. Mi agradecimiento a los autores de las viñetas, que esta vez y sin que sirva de precedente, han hecho el "trabajo sucio" por mí.
Hasta que no resucite Torquemada, nazca un descendiente de Nerón (con sus virtudes y sus defectos) o alguien se reencarne en un "Herodes anti políticos", esto no tiene solución.
Mientras tanto, como dice el refrán, ajo y agua...