El que fuera ministro de cultura en España escribe esta reflexión sobre el hecho de leer. Capítulos cortos que lo abordan desde varios ángulos: leer obras de pensamiento, ficción o poesía, el papel de la memoria, el ritmo y estilo de lectura; la escritura, el estudio, el entretenimiento; leer de noche, leer en distintos formatos; leer los clásicos; leer con atención.
Se nota formación clásica (griego y latín) y evidente sesgo filosófico (Nietzsche, Derrida, Ricoeur). El estilo es espesillo y a veces poco transparente. Prefiere “es algo otro” a “es otra cosa”, y cosas así. Hay frases que parecen adivinanzas. Es mucho riesgo esperar que el lector vaya a leerlas varias veces.
Con todo, no está mal. No es lo que yo recomendaría como “animación a la lectura” pero el que ya lee sacará algunas cosas.