DAVID S. WARE: David S. Ware Quartet Corridors & Parallels
- David S. Ware: Saxo tenor. - Matthew Shipp: Sintetizador. - William Parker: Contrabajo. - Guillermo E. Brown: Batería.
01. (Untitled Track) 02. Straight Track 10:03 03. Jazz Fi-Sci 4:22 04. Superimposed 5:58 05. Sound-A-Bye 3:09 06. (Untitled Track) 07. Corridors & Parallels 9:00 08. Somewhere 3:11 09. Spaces Embraces 3:18 10. Mother May You Rest In Bliss 6:08 11. (Untitled Track)
AUM Fidelity AUM019 CD 2001
David S. Ware Quartet, Corridors & Parallels (AUM Fidelity, 2001)
La presente entrada sirve para llevar a cabo un pequeño homenaje, a raíz de la noticia de la muerte el día 18 de Noviembre de 2012, de uno de los músicos más importantes de la libre improvisación de los últimos años, el saxofonista David S. Ware.
David Spencer Ware, conocido musicalmente como David S Ware, nació en Plainfield, Nueva Jersey, el 7 de Noviembre de 1949. A finales de los años 60 llegó a estudiar a en la prestigiosa Berklee College of Music de Boston, para trasladarse en el año 1973 a Nueva York, ciudad en donde tuvo la ocasión de trabajar con un buen nutrido número de músicos que actuaban en clubes y en los famosos loft. Su fama comenzó a venirle de su adscripción al grupo de Cecil Taylor, con el cual grabó y llevo a cabo giras por todo el mundo. Es por esa época que también colabora con el baterista Andrew Cyrille en el grupo llamado Maono.
A lo largo de los años 80, Ware grabó y actuó con regularidad como líder, principalmente en formato de trío, formación que tuvo junto a Marc Edwards y William Parker y que fue la simiente de lo que sería su gran formación en cuarteto, con la que grabó y actuó de forma prolongada. El cuarteto original se encontraba integrado por David S. Ware, Matthew Shipp al piano, William Parker al contrabajo y Marc Edwards a la batería. Este puesto es el que cambió con más frecuencia, siendo ocupado y de forma sucesiva por Whit Dickey, Susie Ibarra y Guillermo E. Brown, también llegó a participar en este cuarteto, pero de forma muy puntual, Hamid Drake en sustitución de Guillermo E. Brown. Es esta formación la que le reportó algunas de sus mejores grabaciones, como la que se comentará de Corridors&Parallels o la de Freedom Suite, un claro homenaje a uno de los músicos que más admiró y le influenció especialmente en su periodo formativo (fue Rollins quien enseño a Ware la técnica de la respiración circulatoria), hasta que en el año 2007 el saxofonista disolvió esta formación con el disco Renunciation. Tras el desmantelamiento de esta agrupación, David S. Ware siguiendo grabado (principalmente en el sello discográfico AUM Fidelity que es donde se puede encontrar el grueso de sus grabaciones), y lo hizo en diversos registros, en trío, en solitario, para acabar de nuevo en formato de cuarteto.
David S. Ware fue un claro continuador de los postulados misticistas y espirituales provenientes de la escuela del freejazz y heredero de músicos de la talla como Charles Gayle, de Albert Ayler y muy principalmente de John Coltrane, hasta el punto que se ha llegado a ver en la forma de interpretar de David S. Ware, algunos modos y giros provenientes de la época de grabaciones de Coltrane como Meditations.
Para la leyenda del jazz queda la anécdota cuando unos periodistas preguntaron a Sonny Rollins cuál era en su opinión, el saxofonista que más le había impresionado de todos los jóvenes valores que existían en ese momento. Rollins contestó: “¿Han escuchado a David S. Ware?". Tras esta categórica afirmación por el “coloso” del saxofón, el mencionado músico fue fichado de forma repentina por Sony/Columbia, tal vez con la idea de que habían encontrado un filón que les reportaría pingües beneficios. La contratación de Ware por una de las grandes compañías discográficas, un músico representante del estilo más libre y a veces desbocado a nivel creativo, causó en su momento un gran revuelo en el mundo del jazz. Parece ser que detrás de tal decisión se encontraba la opinión y el conocimiento que tenía de la forma de tocar de David S. Ware el director artístico de la sección de jazz, que no era otro que ni más ni menos que Branford Marsalis. A pesar de ello, David S. Ware tan sólo grabó dos discos para Columbia (Go See the World -Columbia, 1997- y Surrendered -Columbia, 1999-), para volver al ostracismo y la poca visibilidad de los sellos independientes, y para seguir su extraordinaria carrera musical.
La figura de este sensacional músico de alguna forma ha trascendió fronteras, hasta el punto que el reconocido cineasta David Lynch realizó en el año 2011 a través de su fundación televisiva (la David Lynch Foundation Television) un documental a cerca de su figura de casi un cuarto de hora de duración, con un título bien explícito y significativo: David S. Ware: A World of Sound. En la presentación del documental el mismo David S Ware manifiesta que no se encuentra interesado en los tocar acordes cambiantes, sino que su filosofía de trabajo se basa en conceptos, y que su voz, es una voz dentro de la música, tratando para ello de manifestar un “mundo de sonido” (se acompaña link para el visionado del mencionado documental: http://dlf.tv/2011/david-s-ware/#).
Corridors & Parallels tal y como se ha señalado anteriormente es una de las mejores grabaciones del excelente cuarteto que detentó David S. Ware, y así mismo, un claro ejemplo de la música y de las orientaciones musicales que en ese momento planteaba su líder. En este trabajo tremendamente heterogéneo y con un sinfín de caras musicales, nos podemos encontrar con planteamientos procedentes de la escuela clásica del freejazz, sonidos eléctricos, cósmicos, sonoridades africanas y de congas. Corridors & Parallels demuestra una cohesión grupal de excepcionales dimensiones, en donde toda y cada una de las contribuciones son importantes, desde las interesantes sonoridades de los sintetizadores y órgano de Matthew Shipp, por momentos melódicas y en otras ocasiones más cerebrales; o la musicalidad y la sencilla belleza del trabajo con arco de William Parker hasta confluir a la batería de Guillermo E. Brown, que desprende un sinfín de sonoridades, texturas y colores. Las aportaciones del grupo hacen fluir la música en su conjunto y muy especialmente las aportaciones de David S. Ware, con un discurso por momentos extremadamente libre y suculento, para desplegar líneas de sonidos y principalmente todo un expansión sonora que demuestran el mundo musical del saxofonista, tal como sucede en el excelente y escalofriante corte “Mother May You Rest In Bliss”, un tema con ciertos aire de blues en honor a su madre Lucille Ware que murió en el mismo año de la grabación, e igualmente en “Superimposed” y “Sound-A-Bye”. Un estupendo disco que de alguna forma resume el arte y la concepción musical de unos de los más interesantes libre improvisadores de los últimos tiempos, y que debe de servir para descubrir o en su caso redescubrir, el extraordinario legado musical que nos ha dejado. INFORMACIÓN ADICIONAL: Como información adicional se acompaña link para visionar la presentación del documental llevado a cabo por David Lynch: David S. Ware: A World of Sound.