Si hay algo que hemos aprendido los lectores de cómics de superhéroes, es que es mejor andar con pies de plomo cuando leemos frases como “nunca volverá a ser como antes…” o “el fin de todo como lo conocías”, y demás grandilocuencias por el estilo. Si, todo muy de los noventa y muy del estilo Marvel, editorial que entró en barrena, no solo económica, creativa y estuvo años desandando lo que nunca debería haber recorrido. Crossovers infinitos y sin ningún sentido, muertes (recuerdo la de Tony Stark, entre otras) y reinicios como si de una huída adelante se tratase. Muchos fueron los que huyeron de un estilo no apto para un lector inteligente.
Mediada la primera década del s.XXI, parece que volvemos a las andadas. Desde Marvel se inicio Vengadores Desunidos, y no hemos parado un instante. Civil War, la Iniciativa, Invasión Secreta, Reinado Oscuro, Asedio, La Edad Heróica y ahora, Fear Itself, han metido en eventos y crossovers a todos los personajes Marvel. Y, si alguno se quedaba fuera, hemos tenido Complejo de Mesías, Advenimiento, etc. para los mutantes y Tierra de Sombras para otros. Si a eso sumamos las sagas cósmicas y la Guerra del Caos, sumamos una cantidad de eventos casi impensable de poder seguir. Con una excelente política de marketing, Quesada consiguió que muchos fueran los que, deslumbrados por los focos, olvidaran que retrocedíamos casi veinte años.
DC parecía hacer las cosas de otro modo, aunque la procesión, como dirían algunos, iba por dentro. La complejidad de su multiverso ha hecho que con cada explicación, todo pareciera complicarse aún mas. También hemos tenido crossovers y eventos, pero la realidad es que en España han pasado desapercibidos. Y llegó Crisis de Identidad para cambiarlo todo. Porque si en DC pronuncias Crisis, todo el mundo recuerda aquel megaevento que lo cambió todo, Crisis en Tierras Infinitas. La cuestión es que también la editorial de Superman y cía., comenzó a tener esa necesidad de lanzarse a, de alguna forma, unificar su multiverso y trazar una línea central por donde caminar. Crisis Final, 52, La Noche Mas Oscura, el Día Mas Brillante…para acabar en Flashpoint. Curioso el papel de Flash a lo largo de la historia deceera. Fueron dos de las versiones del personaje, las que abrieron la cortina a las realidades paralelas y de nuevo es uno de ellos quien se convierte en pieza central en Flashpoint.
Flashpoint lo cambiará todo. De hecho, el punto de partida de la miniserie es un cambio en el pasado que transforma la realidad que conocemos. El argumento del viaje en el tiempo, tantas veces utilizado, volvemos a verlo en el mundo del cómic. Aunque terminará en Agosto, ya sabemos que “algo” ocurrirá para que nada sea igual.
No importa el qué o el cómo del cambio. Lo que importa es cuanto durará. La impresión de estar ante una especie de Era de Apocalipsis toma forma conforme vemos lo que vendrá. Hablamos de series y personajes que, en muchos casos, superan el medio siglo de vida, con el lastre de continuidad que supone para cualquier lector novel.
Lo peor es que imaginamos que llegará un momento en el que tocará volver a la situación pre-Flashpoint, lo que levantará las voces críticas de muchos lectores y, quien sabe, hará huir a muchos otros, cansados de las políticas erráticas de la editorial.
Si fueran inteligentes, se lo pensarían dos veces antes de mover ficha vendiéndonos lo que realmente no es. Pero, eso es mucho pedir.
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